Hubo un gran momento de tensión. Murmuros en la casa. ¿De quien serían? Me giré un momento. Todos. Todos estaban allí.
Volví a mirarle. Se había arrodillado en la arena de la playa y abierto una cajita negra. Un anillo con un pequeño diamante asomaba. Era precioso. Le miré a los ojos que resplandecían a la luz de la luna. Aquellos que me hechizaban siempre que miraba en ellos. La gente dice que él amor verdadero solo se vive una vez. Yo creo que él amor verdadero se vive siempre que estés con la persona adecuada. Marco es él amor en persona. Antes de conocerle, no había querido a nadie de esa manera y no era consciente de que mi ídolo acabaría siendo mi alma gemela. Le quiero tanto...
-Si.-Le dije.-Claro que quiero casarme contigo Marco.
Nos dimos un beso del que no pudimos salir facilmente. Por unos momentos dolo estuvimos él, yo y la luna. Claro esta que los momentos no duran para siempre. Auque a veces queramos que sea así, oímos voces en casa de mi hermana. Nos giramos y, que vergüenza. Allí estaba todo él equipo de Marco, mi hermana, Alex, Natalia y Sara y por ultimo, la pequeña Chloe. Ella estaba muy emocionada, se la veía en la cara.
Ay, que vergüenza. Él Real Madrid al completo.
-Que corra él aire.-Dijo Isco.-Hay niños delante.
Isco se acercó a Chloe que se estaba riendo y le sacó la lengua. Ella se sentía mayor y no le gustaba que le llamasen niña.
-Vaya parejita.-Dijo Lucas.
-¡Que vivan los novios!-Dijo Isco.
Todos repitieron la frase.
-Callate Alarcón.-Le dije.
Me miró con su clásica cara cuando le decía eso y me puse a reír.
Miré hacia ambos lados de la playa. Nadie nos había oído. Que alivio. Lo ultimo que quiero es que la prensa venga aquí y nos fastidie él momento. Aunque ya no sea tan especial como al principio.
-¿Que hacen estos aquí?-Le pregunté a Marco señalando la casa.
-Ni idea. Deberían estar en Madrid.
Le cogí de la mano y nos acercamos a ellos. Todos nos felicitaron. Me separé de Marco para poder ir con mis amigas.
Me acerqué a Natalia y me abrazó.
-¡Felicidades! Me alegro mucho por vosotros dos.
-Si, que bien.
-Bueno, te tengo que contar una cosa pero... Ahora es tu momento. Ya te lo contaré cuando volváis a Madrid.
Era la mujer mas feliz de todas.
Mi hermana se acercó a nosotras sonriendo.
-Que te parece hermanita. ¿Te gusta?
-Como no me va a gustar. Voy a casarme con él.
-Me alegro.
-¿Fuiste tu quien avisó al equipo?-Le dije.
-Yo, nooooo- Dijo con ironía.
Me abrazó y yo se lo devolví.
Me contó de lo que habían estado hablando en mi habitación unas horas antes y lo comprendí todo.
Cuando por fin me dejaron todos empaz y me pude quedar a solas con Marco. Después de mucho insistir en que se hacía tarde, nos dejaron empaz.
-Gracias.-Le dije.
Nos besamos allí, en la playa.
-No se que haría sin ti. ¿Quieres volver a casa?
-Si, quiero volver contigo a Madrid.
-Mañana. Ahora, vamos a dormir que ha sido un día muy movidito.
Esa noche, dormimos en mi habitación los dos juntos, acurrucados uno frente al otro. Eso si, como prometidos. Yo ya me había puesto él anillo.
No podía dormir de la emoción.
Me levante de la cama con cuidado de no despertarle y cogí las fotos de la mesita. Miré la que tenía mas cerca. Aparecían mis amigas Natalia y Sara, yo y Marina. Con todo lo que había pasado, no me había parado a pensar en ella. Me volví a acostar cerca de Marco. Me llegó un mensaje al móvil y como no podía dormir, lo miré.
En él decía: No me hace gracia lo que ha pasado con Marco. Espero que te lo pienses bien. No te lo mereces. Yo si. No eres nadie. De no ser por aquel día, sería yo la que me casaría con él.
Claro, como no. Hablando de Marina, ahí estaba. ¿Como se habrá enterado de que me iba a casar con Marco? Dejé él móvil y me olvidé de ello. Marco si que se había dormido, parecía un ángel. Su respiración era acompasada. Me abrazaba y yo a él. Sus ojos marrones cerrados y sus cálidos labios también. Era él único sitio en él que en ese momento me apetecía estar. Entre sus brazos, protegida del mundo exterior, de los peligros que me acosaban constantemente.
Unas preguntas me llevaban rondaban por la cabeza ya un rato. ¿Que era eso que Natalia me tenía que decir tan urgentemente? ¿A que se refería Marina con "De no ser por aquel día"?
Me quedé mirándole un rato hasta que no pude mas que me entró él sueño y me dormí plácidamente entre sus cálidos brazos.
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Idolo||Marco Asensio
FanfictionQuien iba a decir que un día como otro cualquiera, alguien por la calle resultase ser tu mayor ídolo. Desde luego, Celia no lo pensaba. A veces el karma puede compensarte, no? -CORRIGIENDO (corregido 13 de 66)