CAPITULO 34 SIEMPRE DAVID

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Anastasia se despertó a las 8:00 am emocionada porque ese día iría de tour por Atenas con David, ya tenía el itinerario, y ahora bajo a preparar comida para tener un picnic al mediodía en el parque Almudena.

A las 9:00 su teléfono repico y era un mensaje de David.

— Voy en camino.

Anastasia se apresuro a subir a cambiarse emocionada y muy feliz.

Liam despertó con una gran resaca, el día anterior sus amigos terminaron convenciéndolo para ir a la discoteca donde tomo mas de la cuenta y ahora tendría que asumir las consecuencias.

Salió de la cama y se lleno de culpabilidad al ver a la mujer que había dormido con el, una antigua amiga y amante y entre bailes sugestivos, luego besos instigados pro ella pero que el correspondió, su libido tomo el control y había tenido sexo casual.

Se sentía terrible porque había traicionado a Anastasia y aunque ella no lo supiera jamás su conciencia no lo dejaría tranquilo, entonces se dio cuenta cuando amaba a Anastasia porque en otra ocasión esto no habría sido motivo de un dilema moral, había tenido novias y las había engañado igual, pero con Anastasia era muy diferente.

Su conciencia le dictaba que le debía confesar a ella lo que había pasado, pero su egoísta manera de amar le decía que n lo hiciera o la perdería, así que optaría por lo segundo.

Alethea entro a la oficina de Rubens sin avisar y este se encontraba reunido con dos caballeros y su primo enseguida le dirigió una mirada de represión.

Rubens despidió a los dos hombres

— Okey continuaremos después

Tan pronto se quedaron solo el despotrico contra ella.

— Esos son los modales que te han enseñado Alethea, estaba en una reunión- replico molesto.

— Disculpa primo, pensé que no era necesario que me anunciara como una desconocida.- resoplo ella acomodándose en la silla frente a su escritorio y donde tenia una visión completa de su guapo primo que en esos momentos tenia una expresión de mortificación, que bueno que algo lograba sacarlo de sus casillas, en este caso ella era la piedrita molesta en el zapato, pues que se friegue- pensó- acaso solo ella debía pasarla mal ante sus constantes desplantes.

— Bien a que debo el honor de tu visita- pregunto reclinándose en el sillón y mirándola con suspicacia, la conocía perfectamente para saber que se traía algo entre manos.

— He venido a hablar contigo de negocios-informó ella asumiendo una actitud profesional.

¡Profesional una mierda!, pensó el, esta niña era una manipuladora y se complacía en sacarlo de sus cabales.

— Negocios tu y yo en una oración, suena extraño- se burlo Rubens y ella le rodo los ojos.

— Se que acabas de cerrar un trato con Givenci, una de las casa de modas mas importantes de Milán y quiero ser una de sus modelos- informo como si hubiera planteado algo natural y posible pero el no lo permitiría bajo ningún concepto, no porque no pensara que Alethea estuviera a la altura, ella era una chica muy hermosa, con altura apropiada, el cuerpo perfecto, esos hermosos ojos café que lo hipnotizaban y esa piel tersa de bebe, además de ser una alumna aventajada en una de las academias de modelaje de Grecia, pero lo que le chocaba la idea es que eligiera ser modelo y así estaria en el foco de todos los hombres

Ella continúo alegando

— En realidad será como una pasantía, sabes que estudio modelaje y...

— De ningún modo iras a Italia-negó categórico- además ya Givenci tiene su plaza de modelos completa, porque te contrataría a ti una modelo sin experiencia y sin currículo y portafolio.

ANASTASIA I "El Rey Soñado"Serie:  Reyes y PrincesasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora