Lo siento, me ha costado trabajo actualizar porque no puedo hacerlo desde casa y en mi trabajo no tengo tiempo, pero aquí les dejo la actualización... prometo tratar de subir otro capítulo hoy mismo...Besos tronados!!
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Las siguientes semanas me dedico, aparte de seguir dirigiendo el negocio, a preparar todo para la visita del jefe al rancho. Ya estamos a 27 de noviembre y sigo sin tener noticias. Me estresa pensar que llegue diciembre y me tengan en la misma situación, con la carga de trabajo que se avecina para esas fechas, no me gustaría tener que soportar ese tipo de presión.
Por otro lado, mi plan alterno, ha funcionado a la maravilla, no se lo he comentado a nadie de mi confianza, porque sé que no es buena idea. Pero esto asegura un mejor futuro para Emma y para mí. Así que, aunque estoy presionado, también me encuentro feliz por la resolución a la que he llegado.
Ya está por terminar el día, Emma y Lety salieron a correr, ya no deben de tardar en llegar, porque el sol empieza a ocultarse con rapidez. Me encuentro en el granero, cuando mi celular suena, lo contesto rápidamente.
-Villanueva ¿Estás listo para recibirme?- me pregunta la familiar voz del jefe del otro lado de la línea.
-Desde hace semanas patrón- le digo con una sonrisa.
-Esa voz me agrada. Mañana estoy por allá, aún no sé la hora, pero te hablaré cuando me acerque al lugar para que tu gente vaya a recibirme- me indica. -Tenemos mucho que celebrar tú y yo- me dice contento.
-Me agrada escucharlo decir eso jefe. Tenga por seguro que lo recibiremos como usted se merece- le digo al recordar las cajas y más cajas de su whisky favorito y el de su gente.
-Muy bien Villanueva, te veo mañana- me avisa y cuelga la llamada.
Perfecto, esto es lo que esperaba.
-¡Meño!- le grito al verlo en el área del gimnasio. Él se acerca corriendo.
-Dime Ángel- responde.
-Los veo en diez minutos en la cocina de la casa a ti, a Vargas y a Chino. Lety está corriendo con Emma, luego la pondremos al tanto- le digo y me dirijo a la casa.
Siento una sensación de nervios en mi estómago, por todo lo que esta visita trae consigo. Pero ya está hecho y es la única manera de asegurar un futuro con Emma, con una vida en la que ella esté lo más segura posible. Llego a la habitación y abro el armario para buscar el teléfono satelital. Lo enciendo y mando un corto y breve mensaje.
-Será mañana, estén al pendiente de mi llamada- lo envío y lo apago de nuevo.
Bajo a la cocina, donde los muchachos ya me esperan.
-Mañana llega El Conquistador- les aviso sin más preámbulos.
Ellos se muestran sorprendidos, a pesar de estar preparados. Las medidas que hemos tomado para esta visita, no permitirán que nada nos tome desprevenidos, al menos eso espero. Siempre mantengo dos camionetas vigilando la carretera, asegurándose de reportar cualquier cosa que vean sospechosa, hasta hoy, no ha habido nada. Pero no voy a bajar la guardia.
En ese momento miro que llegan Emma y Lety, se quedan paralizadas cuando nos miran, sé que tenemos pinta de malas noticias y no es para menos, los momentos de tensión empiezan a partir de ahora.
-Mañana explicaremos la estrategia por grupos. No quiero fallas- les digo.
-¿Qué pasa?- es Lety la que pregunta.
