SPRING NIGHT © | SUGA - BTS.

CAPÍTULO CINCUENTA Y SIETE

POV Yoongi

Después de pensarlo decidí ir a buscar a Mary a su universidad para pasar un rato con ella.

En el camino solo le sacaba tema acerca del bebé y como se sentía, lo cual fue suficiente para que hablara todo el camino de sus eternos malestares e infinitos antojos.

Me regaño por no ir a la primera ecografía pero le explique la razón la cual entendió de inmediato haciendo que se le pasara todo tipo de rencor.

Al llegar al apartamento, acariciaba a Kimmy quien se encontraba durmiendo en mi abdomen mientras yo estaba recostado en el mueble y Mary decidiendo que quería comer, ya que salió con la excusa de que tenía tiempo que no la invitaba a comer y eso no puede pasar en una relación de mejores amigos.

— ¡Ya decidí! — Viene a pasos rápidos — ¡Quiero comida china!.

La miro mal y ella sonríe de oreja a oreja.

— Siempre pides lo mismo — Ruedo los ojos.

— ¡Claro que no! — Señalo la mesa y hay una caja de un restaurant chino vacía.

— Bueno, quiero hamburguesa — Sonrío y le digo que pida ya que estaba demasiado ocupado con Kimmy y yo me encargaba de pagar cuando el pedido llegara.

Como niña chiquita hizo lo que le pedí y fue a pedir la comida.

Revise mi celular y no había señal de Hanna, suspire frustrado y guardé el móvil.

— Uy, que suspiro — Sonrío a medias y Mary se sienta en una silla frente a mí — ¿Hanna?.

Asiento y ella hace una mueca.

— Siento que las cosas.... No, no siento — Me corrijo — Las cosas no van como deberían.

— ¿Qué sucede? — Cierro mis ojos por un momento y empiezo a contarle todo.

Desde las malditas llamadas de hace semanas hasta la promesa de ayer. Le conté cada detalle, hasta más de lo que debería haciendo que Mary abriera sus ojos a más no poder y me gritara que no quería los detalles.

— Mary, Hanna es la chica perfecta, ¿sabes? — Me enderezo en el asiento colocando a Kimmy en el suelo quien ya se había despertado por los gritos de Mary — Es todo lo contrario a lo que decía que quería en una novia. Es tan... ella.

— Ese poder lo tenemos las latinas — La miro mal y se encoje de hombros.

— La amo Mary, de verdad lo hago y se que ella a mí pero con todas estas cosas, la llamada de anoche, el tipo contestando. Podría tener voz de secuestrador fácilmente, era demasiado gruesa — Agudice mi voz al final haciendo que Mary riera — No quiero perderla, me niego a que eso pase. Pero desde anoche la noto tan putamente distante, después de ver el móvil es como si fuera otra persona, ¿me entiendes?.

Ella asiente y me mira por unos segundos.

— Sé que Hanna te ama, lo sé mejor que nadie así que por esa parte puedes estar tranquilo — Respiro profundo — Y por la misma razón de que se que te ama, dudo que haga algo que pueda lastimarte — Conecto mi mirada con la de ella y se que está siendo totalmente sincera — Ella siempre va a preferir lastimarse a sí misma que lastimarte a ti.

En eso tenía razón. La conocía demasiado bien como para saber que es capaz de lastimarse a lastimar a los demás. Su don y desgracia, es preocuparse más por los demás que de ella misma.

— ¿Han hablado hoy? — Niego. Saca su móvil, teclea varias veces y lo lleva a su oreja.

Segundos después cuelga y me mira. Repite el proceso anterior llevándola al mismo resultado.