Más que suerte [WARMI]

SHE IS LIKE THE WIND

J: Ana, que.... - se calló al ver a Mimi - hola...

A: Jadel, mira, ella es Mimi -su voz sonaba nerviosa, la rubia le ofreció la mano, Jadel la cogió y aprovechó para tirar de ella y darle dos besos y Ana rodó los ojos.

J: Encantado - dijo desplegando la mejor de sus sonrisas.

M: Ehhh, igualmente - dijo ya por educación - Ana, debo irme.

A: Claro - la miró - te acompaño a la puerta.

M: Adiós, James?

J: Puso una sonrisa falsa - Jadel...

M: Eso...

J: Hasta otra - dijo observando cómo las dos iban hacia la puerta, cuando salieron de su campo de visión, se sentó en la cama y se dispuso a esperar.

M: ¿Y éste es? - le dijo bajito.

A: Mi representante, es un poco pesado - se acercó a Mimi y le dio un pico - nos vemos a las 7.

M: Le guiñó un ojo y le sonrió - Por supuesto, señora - le dio otro pico y se marchó.

M: Hola!!!

Ricky: ¡Niños, la rubia nos honra con su presencia!

Thalía y Kibo: Se acercaron y le dieron besos y abrazos - ¡Enhorabuena, señora!

M: Gracias - se reía como siempre con ellos - ¿habéis estado ensayando el recibimiento?

R: Sí maricona - se acercó y se dieron un abrazo - tienes mucho que contarnos...

M. Bueno, lo fundamental lo sabéis, pero sabéis lo más fuerte? - todos negaron con la cabeza - Ana es cantante... y, al parecer, muy famosa...

R: Empezó a cantar y bailar - En un chico malo, no no no! Pa fuera lo malo, no no no! - empezó a reírse.

M: ¡Cómo no! Ya lo sabías...

R: En cuanto vi las fotos de la boda...

Mimi les contó a sus amigos lo que había pasado desde que se despertó aquella mañana y que estaban invitados a cenar con Ana. Thalía y Kibo la frieron a preguntas hasta que llegó la hora de arreglarse que se fueron dispersando.

M: Ricky, estás extrañamente callado.

R: Ven anda, siéntate aquí conmigo - tiró de ella cuando se acercó, la sentó en sus piernas y le dio un abrazo - ¿cómo te sientes, rubia? Qué piensas de todo esto? Si es que has podido parar esa cabecita un poco y pensar.

M: Pues... la verdad es que me siento extrañamente bien, llevo bien eso del matrimonio.

R: No llevas ni un día, flipada - le sonrió - pero si estás bien, me alegro por ti.

M: Lo sé, aunque acabo de perder una apuesta y me la van a reclamar.

R: Pensó un poco y sonrió - Te has casado antes de los 40.

M: Me he decepcionado a mí misma, sí...

R: Bueno, te vas a divorciar, te has casado técnicamente pero quizá te dejen en paz porque no va a durar mucho

M: Bueno, primero, no me van a dejar en paz y lo sabes, con lo que me he reído y me he metido cuando se han ido casando todos... y segundo, nadie ha dicho que me vaya a divorciar, no hemos hablado de nada de eso...

R: Pero entra dentro de la lógica, ¿no crees?

M: Suspiró -Supongo...

R: Le dio un beso en el pelo - Venga, levanta y ve a ponerte guapa para tu mujer, no se vaya a fijar en otra...

Mimi pensó en la pregunta de Ricky mientras se duchaba. A decir verdad, no sabía bien cómo se sentía o qué pensar sobre lo ocurrido, las cosas habían pasado demasiado rápido desde la noche anterior. Salió de la ducha y abrió su armario, se decidió rápido por la ropa ya que no había llevado más que una cosa medianamente elegante. Desde luego, los días en Las Vegas iban a ser más sorprendentes de lo que pensó antes de salir de Madrid. Y en esos pensamientos estaba cuando sonó su móvil.

M: ¡Mamá!!

MM: Hija, que como yo no llame te olvidas que tienes madre.

M: Eso nunca y lo sabes, ¿cómo estáis?

MM: Bien, te echan de menos, pero todo el mundo perfecto.

M: Mamá, si te cuento algo me prometes que no vas a pensar que estoy loca?

MM: Suspiró - Inténtalo, pero no te prometo nada.

M: Mamá, me he casado.

MM: ¿Qué te has qué?

M: Casado, mamá... mi mujer se llama Ana.

MM: Hija, ¿estás bebida? - empezó a reírse.

M: ¿No me crees? Cuelga que te mando una cosa... - su madre le hizo caso, ella le mandó las fotos de la boda a su madre y volvió a llamarle cuando vio el doble símbolo azul - mamá...

MM: Hija... cuando pensaba que ya no podrías sorprenderme ya, me sales con estas...

M: ¿Qué te parece mi mujer?

MM: Guapa, eso no te lo niego y parece agradable... estáis muy guapas, como broma es divertida.

M: No, mamá no es ninguna broma, ya sabes que no suelo pillarlas... es un matrimonio legal aquí y en España - oyó a su madre suspirar al otro lado de la línea - ahora es cuando me dices que me divorcie porque es lo lógico.

MM: No hija, yo no te diría eso, la lógica no es algo que tú sigas a rajatabla.

M: Soltó una carcajada - Me conoces como si me hubieras parido...

MM: Te gusta la chica, te lo puedo intuir en las fotos y tu voz me lo confirma.

M: Sí que me gusta, no la conozco demasiado pero ya ves... es guapa, tiene unos ojazos marrones preciosos, te sonríe de una forma preciosa y tiene un acento dulce que parece que te acaricia al hablar... es dulce...

MM: Hija, la baba, que la puedo imaginar desde aquí. ¿Sabes qué? Si tú estás feliz, yo estoy feliz, ya hemos pasado por muchas cosas malas para que el hecho de que te cases pueda ser algo malo.

M: Se le escapó una lágrima - Te quiero mucho mamá y no te lo digo lo suficiente.

MM: Y yo a ti, cariño...

Cuando llegó a la altura de Jadel, Ana vio que tenía la carpeta roja en la mano y entrecerró los ojos previendo el chaparrón.

J: ¿Me puedes decir qué significa esto? - le dijo, casi desgañitado blandiendo la carpeta.