Por el pequeño radio, nosotros escuchábamos todo lo que Juca iba a decir, escuchábamos su respiración pesada, todos nos sentíamos nerviosos, esperando que todo saliera bien. Yo traía el equipo en los faldas, esperando por si Juca me necesitaba.
Este llamó a la puerta entonces, y esta se abrió.
-Xaris -susurró Juca, la puerta estuvo a punto de cerrarse pero Juca la detuvo con las manos -no, espera, esto es importante, escúchame por favor.
Duraron unos minutos en silencio y después lo rompió Xaris.
-Bien, tienes dos minutos.
-Yo... -suspiró, pensando qué decir - quisiera volver a amarte, volver a quererte, volver a tenerte cerca de mí, girl mis ojos lloran por ti, me haces tanta falta, no lo puedo negar, no sé como de mi vida te pudiste marchar, arrancaste mi corazón, como un trozo de papel.
Lo decía como si estuviera recitando un poema.
Todos en el coche nos volteamos a ver confundidos.-¿Eso no es una canción?
Preguntó Arisbeth.
-Sí, -dije, presioné el botón en el micrófono y hablé -Juca, detente, lo estás arruinando -podía ver a Xaris desde donde yo estaba, y ella lo miraba con el ceño fruncido -dile algo lindo, que salga de tu corazón, no una letra de canción.
-¿Esa era una canción?
Preguntó Xaris.
-Eso... bueno, escúchame, es que soy realmente malo con las palabras, no sé qué decir nunca, yo simplemente quería pedirte perdón por lo que pasó.
-¿Pedirme perdón? ¿Pensaste que viniendo aquí, a decirme unas palabras de una canción que ni siquiera me gusta, yo te iba a perdonar?
-Pues -Juca se veía realmente nervioso -¿si?
-¡No!, eso no se arregla así, al menos hubiera sido algo que salió de ti, pero viniste con la letra de una maldita canción, no Juca, no, no, y ahora vete de mi casa, no quiero volver a verte.
-Oh no -dijo Jan -necesita ayuda ahora.
Y antes de que lo pudiéramos detener, salió del coche, y comenzó a caminar con decisión hasta donde Juca y Xaris.
-Escucha -le dijo a Xaris -este hombre es un idiota, es pésimo con las palabras, nunca piensa antes de actuar, y siempre arruina todo, pero es el tipo con el corazón más grande del mundo, yo nunca lo había visto enamorado, él nunca le había rogado a una chica, eres la primera, y deberías sentirte afortunada por eso, hay miles de chicas detrás de Juca, pero él te eligió a ti, este pobre hombre puede construirte un carro que ya esté hecho ruinas, pero no puede reconstruir su corazón.
Xaris volvió la vista a Juca, esta vez no estaba molesta, estaba roja de coraje.
-¿Trajiste a tus amigos -dijo en un susurró, aprentando los dientes -y nos estaban escuchando?
-Ammm... -para este punto Juca ya temblaba de los nervios, o de miedo -¿no?
Xaris le quitó el audifono del oído, y con este salió el micrófono que Juca llevaba colgando en el cuello de la camisa.
-¡Te odio! -explotó Xaris -eres un imbécil -comenzó a empujarlo -largo de aquí, no quiero volver a verte nunca más, si tienes miles de chicas detrás de ti, pues vete con ellas, a mí déjame en paz, no vuelvas a llamarme, y mucho menos vengas a mi casa.
Entró a su casa, y cerró la puerta con fuerza, Jan y Juca estaban confundidos, y miraban la puerta de la casa, ahora cerrada.
-Escucha -gritó Jan -mi amigo no va a irse de aquí hasta que tú lo perdones, si es necesario que pase aquí la noche, pues lo hará.
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Buscando La Manera Para No Enamorarnos [Juanpa Zurita]
أدب الهواةLas reglas eran simples: No mirarse, no hablarse, no tocarse, no acercarse. Ellos la rompieron todas... incluso la más importante: No enamorarse. Participación de: Los caballeros y JanCarlo Bautista.