Miércoles.

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TaeHyung miraba a YoonGi como si fuera un bicho, deseando aplastarlo, era la primera vez que eso pasaba, porque, conociendo a Tae, él quería muchísimo a todos.

Hyung...deja de mirar así a papá. -

—No lo hago queriendo, Hyun-Ki.

—¿Entonces?

—Le hizo algo a Jimin. - Dijo TaeHyung, seguro de sus palabras. — Sé que le hizo algo.

—¿Enserio? TaeHyung cada vez me sorprendes más. - contestó YoonGi, mientras caminaba rápido para llegar al hospital.

TaeHyung suspiró, dejándose de tonterías y enfados, volvió a hablar. - Vale, lo siento. Pero ¿Qué le pasó?

—Se encontraba mal. - Dijo YoonGi dispuesto a explicarle.- Y luego fue empeorando y hace días se desmayó y tenía el pulso muy bajo. - Se paró, quedándose inmóvil. —El médico dijo que no sabe lo que tiene, pero que se ve grave.

TaeHyung tragó saliva, sin creerse lo que había oído. No podía perder a su hyung favorito...Y menos ahora.

Volvieron a caminar todos juntos, en cambio YoonGi empezó a correr para llegar lo más rápido posible y así fue, dejando a Tae y a Hyung-Ki solos, ya que no podía ir al ritmo de ellos.

—¡Hyung! - gritó TaeHyung, aunque esas palabras se quedaron en el aire. YoonGi no le hizo caso.

Cinco minutos después llegó al destino, entró rápidamente al hospital y se dirigió a la puerta 201 de la planta 4ª, viendo el nombre de Park Jimin en la puerta.
Su respiración ya estaba acelerada de tanto correr, pues él no estaba acostumbrado a eso. Y además, ¿Estaba listo de ver a Jimin? Y si...

Justo al pensar eso un médico salió de la puerta del chico, suspirando.

No...No, por favor. Pensó.

¿Hm? - le miró el médico, sin entender la situación.- Ah...Park Jimin ¿Eh? - miró el nombre de la puerta. - Ha sido muy valiente, el chico.

—¿Lo ha sido?  - preguntó YoonGi asustado.

—Sí...nunca había visto a nadie como él. ¿Eres un familiar?

—Sí...¿P-puedo pasar?

—¡Dr. Lee! - llamó una doctora. - Le necesitamos en la sala 242. - gritó finalmente.

—¡Ya voy! - contestó él. —Ahora vuelvo chico, espérame. - Dijo mientras se iba.

Pero YoonGi no podía esperar. Tenía al lado a Jimin y necesitaba ver como era su estado.

Abrió un poco la puerta, un cacho sólo.
Tenía miedo de abrirla toda, por si encontraba algo que no quería pero, aún así, antes o después tendrá que hacerlo ¿No?

La abrió finalmente, la habitación era blanca, los sillones, la ropa de recambio, todo.

Incluso la cama y la sábanas. Las miró y, nunca había visto algo tan blanco.

Pero eso cambio cuando su vista captó el cabello rubio del chico.

Ese chico rubio que se supone que estaba casi al borde de la muerte, ahora le estaba mirando con una pequeña sonrisa.

Jimin's Diary. ||YOONMIN +18|| Temp. 1 & 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora