Llegó el verano, por lo que descansaré un tiempo de las mancuspias y podré vagar por la ciudad libremente. Lo que es muy agradable, porque así no me atacará la cefalea, pero también puedo sentirme muy solo.
Eso sí, sin la tensión de las labores por obligación y por dinero, uno está tranquilo y tiene más tiempo para ver la vida desde una nueva perspectiva. Reflexionar que tan conveniente es acercarse a las peligrosas. Si es cierto que ellas tienen el poder de enseñar la magia, también es cierto que existe el riesgo que cobren un alto precio por ello. Las peligrosas cómo seres mágicos sólo pueden brindar esas relaciones tormentosas que dejan el corazón revuelto y el cerebro a punto de la manía ¿vale la magia el precio de caer en una locura autodestructiva? Por ahora con a quién me atreví a acercarmele más es a la tierna elfina, pero en toda su ternura y magia rosa veo que es de temer, pues parece posesiva, tiene la posibilidad de la ingenuidad de un niño que puede llegar a ser cruel en extremo. Siempre ha sido riesgosa la candidez aunque la gente no lo contemple. Ella quiso envolverme en estos días con su misticismo, propio de espíritu contemplativo. Pero se molestó cuando vio mi poca religiosidad. No pudo ocultar su intento violento de volverme adepto al espíritu sagrado. Aunque me siento algo triste por perder una oportunidad, también en algo me tranquiliza. Con la vampiresa también tuve un avance, si a eso se le puede llamar avance, me atrevía invocarla y desee mucho su respuesta pero ahora no he recibido sino silencio. Y de la bella hada aunque la percibí varias veces no sé cómo lograr contacto. Ay Peligrosas! Seres mágicos que a la vez tentan y asustan. Abismos en los que hasta ahora sólo fantaseo caer.
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HOJAS AL VIENTO
AdventureEl diario de un joven que llega a una nueva ciudad con el afán de conseguir sus sueños. El reto de vivir una vida poética.