Capítulo 5.

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Los resultados de sangre habían sido negativos mediante enfermedades. Teddy Lupin al parecer no tenía absolutamente nada.

Draco Malfoy camino de un lado a otro pensando, no era nada sano ver al pequeño postrado en cama y que los resultados salieran nulos.

Pall le estaba ayudando a buscar por el computador según ella proveniente de muggles, a Draco le dio tan igual... Pero hasta ahora le veía la utilidad a esa cosa.

Harry Potter quien no durmió en toda la noche al lado del pequeño Teddy, mientras le sujetaba su pequeña manita. Pensó en las palabras de Malfoy... Si lo hubiese traído aquí al primer síntoma...¿Todo seria diferente?

—¿Puedo?—pregunto Hermione en la puerta. El pelinegro aceptó. Ella silenciosa llego hasta postrarse en aquella silla donde estuvo anoche Malfoy.

—Es tan raro. —dijo conmovida. —El es un niño lleno de vida. Juega, habla, se divertía. Comía, dormía... Pero ahora, tan solo esta ahí, acostado, como si solo estuviese tomando su siesta despues de la cena. —Harry sintió su corazón arder por esas simples palabras. —Lo que me parece raro, es ver como aun estando dormido el logra cambiar la tonalidad de su cabello. Es fascinante.

Harry no había pensado en eso. Quizás solo lo llevo en segundo plano, el tenía esa habilidad heredada de su madre... No era algo raro. No para él.

—Quizas debas preguntarle eso a Malfoy. —comento ella dejando a Harry sin aliento. Después de que lo regañara en la noche por no traer el niño antes de tiempo, quizás hasta Malfoy ya se había hartado de su paciente y fuera a colocar a alguien mas. Aparte Luna se demoraba en llegar.

Malfoy quien pasaba por allí, se introdujo en la habitación pensando que esta estaba sola. Causando un ruido seco.

Ambas miradas cayeron en él, quien se puso algo pálido por tanta atención recibida de aquellos que en su infancia solo hizo burlarles y destruirles en cierta forma.

—Disculpen, no sabía que estaban aquí. —murmuró dispuesto a salir.

—Malfoy. —le llamó Hermione.

Él rubio quedo con la mano en la perilla, quieto, esperando que tenía por decir la castaña.

—¿Te has fijado en su cambio decoloración en el cabello? Puede que nos este mandando una señal, o algo. Aun no se pero es demasiado raro que estando dormi...—Hermione como siempre hablando de mas, creyendo tener la respuesta a todo. Él era el doctor, no ella.

—Si me fije en eso, Granger. —Murmuro de mala gana. —Y para usted, soy Doctor Malfoy. —dicho eso, salio dando un portazo en la habitación.

¿Porque se estaba comportando así? Que tenían esos tres que le colocaban los pelos de punta. No era la primera vez que atendía niños, pero si sentía ser su primera vez con aquel pequeño de piel pálida y pelo blanco. Podría jurar que era verse el de pequeño. Y eso le asustaba.

Capítulo corregido 4 febrero.

Enamorado de San Potter. →Drarry ← Donde viven las historias. Descúbrelo ahora