Capítulo 65.

3.4K 346 19
                                    

Hermione corrió donde Harry para no dejarle caer al suelo.

—¡Harry! Vamos despierta. —lo movió continuas veces. Harry no abría lo ojos.

—¡Hermione! —chillo Luna. Llego a ella y la observó con Harry. —¿Que le ha pasado? —cuestionó.

—Se desmayó. —fue lo único que pudo decir.

—Quizas no ha comido bien. Hermione debemos hacer algo, ¡Draco esta allá gritando y Harry se ha desmayado! Nymphadora quiere vengarse de todo los dolores de su familia con él.

Ambas se quedaron en silencio por un momento.

—Ya se que haremos. —dijo Hermione decidida. Se levanto del suelo y colocó a Harry en posición sentado, al lado de una pared.

—Mira... Haremos esto...

***

Harry veía todo oscuro, no tenía muchas fuerzas, pero al menos podía levantarse.

Hermione no estaba, se encontraba solo en aquel piso.

Recordó que Malfoy estaba sufriendo a causa de Nymphadora.

Se levanto rápidamente y comenzo a buscar.

Camino por pasillos y miraba en cada habitación, hasta dar con aquella cabellera rubia que tanto amaba.

Lo encontro, tirado en el suelo, con lágrimas en los ojos, débil. Harry se acerco rápidamente a él y lo abrazo con todo él amor que pudo.

Draco a penas se inmuto.

—¡Draco! Pensé que ni volvería a verte. —chillo Harry.

—¿Harry? —pregunto Draco abrumado. —¿Como es posible que estes aqui?... Si yo, estoy inconsciente.

Harry se alejo rápidamente del chico rubio que se encontraba tirado en el suelo.

—¿Inconsciente? —preguntó.

Draco asintió.

—Deje de batallar, Nymphadora creo que logro su cometido, el hecho es que ya no siento dolor, puedo descansar al fin un rato.

—¿Te estas oyendo? —Harry se acercó a el y lo levanto del suelo. —Este no es el Draco del que yo me enamoré.

—¡Me quito mi magia Harry! Sin eso no puedo hacer más. Prefiero quedarme aquí, ella tiene razón. Solo soy malo para ustedes dos.

—No, no, no. —el moreno se aferró a él. Tomo su rostro en sus manos y lo miró directamente a sus bellos ojos grises. —Tu no eres malo, para ninguno de los dos. Recuerdas, ¿que salvaste a mi pequeño?  Le ayudaste, cuidaste y le brindaste tú apoyo. A pesar de saber quien era, y con quien estaba. —sus lagrimas comenzaron a descender de sus ojos verdes. —Y a mi... me ayudaste a creer en mi, en que soy buen padre, me diste amor y apoyo mas rápido y puro que cualquiera que yo recibí. Estuviste en los buenos y malos momentos, me apoyaste y yo te apoye. Somos el uno para el otro, ¿lo olvidas? Tú no eres mala persona, eres un excelente doctor, inteligente, perspicaz, autónomo, no sabes cocinar...—Draco rio. — sabes dar amor cuando alguien de verdad lo merece, tú no eres como tú padre, o como todo aquello que ocurrió en el pasado, tu eres esa chispa que aún habita el bien en esta tierra. Eres mi luz, y no quiero que te apagues, porque no quiero aprender a vivir sin tin.

El moreno calló, pues el rubio de un beso aceptó todo el amor que Harry le estaba dando.

—Te amo. —susurro Draco.

—Vuelve. Lucha contra ella, gana y liberanos. —susurro Harry. —Se que ganaras.

—Pero no tengo magi...

—Sh. —Harry tomo sus manos con las de él, las beso lentamente y luego las colocó en su corazón.

Draco entendió que pretendía hacer. Intento alejar las manos rápidamente.

Harry no se lo permitió.

—Lo hago por ti. —y le beso fugazmente.

Draco volvió a la vida.

Enamorado de San Potter. →Drarry ← Donde viven las historias. Descúbrelo ahora