Enamorado de San Potter. →Drarry ←

Capítulo 30.

Draco caminaba con una sonrisa radiante, su semblante cambio drásticamente en esos dos días.

El sol le ayudaba más a iluminar sus bellos cabellos platinados, había pedido permiso a medio día para poder almorzar.

Llego y timbro en aquel establecimiento, una mujer rechoncha y con sonrisa amigable le sonrió al chico.

-Buenos días. Vengo por Teddy Lupin. -habló cortes dejando sin aire a la señora cuarentona.

-¿Acaso no viene Potter...?

-No madame, vengo yo por él.

-¿Quien es usted? -preguntó con amabilidad.

-Su novio. -contesto el chico con una sonrisa ladeada. -Llame al infante, el me conoce.

-No hace falta. ¡Teddy! -Gritó la señora, al instante apareció un pequeño de cabellos azules y sonrisa radiante.

-¡Draco! ¡Draco! -bailo él chiquillo en los pies del rubio.

-Hola pequeñin. -le saludó. -Vamos, tú papi nos espera a comer.

-¿Pizza? -preguntó ilusionado.

-Ya quisieras. -contesto juguetón el mayor. Le levanto del suelo y lo posiciono en sus hombros, mientras cargaba su maleta, Teddy se sintió mas grande que nunca.

-Me alegra saber que eres como otro papi para mi. -comento el infante.

-Sabes que no es obligación que me llames así. -le recordó Draco.

-Papá Lupin y mamá Nymphadora me dejaron muchas personas a mi cuidado, para que yo les ame y ellos a mi. -habló con una energía que contagiaba de melancolía a cualquiera. Haciendo estremecer a Draco. -Ahora serás mi nuevo papi.

-Y tu mi pequeño. -corroboró él rubio mientras le tomaba de las manitas sujetándolo más a él.

Editado marzo 13.