Capítulo 40

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-¿Y si vamos a una discoteca?- propone Paul.
-No, no tengo ganas de gente borracha bailando como loca- respondo.
-¿Y a comer pizza?- dice Liam.
-Acabamos de comer pizza- dice Noah.

Si chicos, es viernes en la tarde y aquí estamos, Liam, Sam, Noah, Paul, Alan y yo, sentado en mi sala, decidiendo que hacer.

-¿Y si vamos a elegir los trajes del baile?- dice Sam entusiasmada.
-Siiii- decimos Alan y yo a la vez.
-No, eso es aburrido- dice Liam.
-Hagamos votación- digo.
-De acuerdo- dice Noah
-Levanten la mano los que NO quieren ir a buscar los trajes- digo resaltando el "no".

Liam, Noah y Paul levantan la mano.

-Levanten la mano los que SI quieren ir a comprar los trajes- digo sabiendo ya que era empate, pero quien sabe, tal vez Paul se arrepienta y también suba su mano ahora.

Sam, Alan y yo levantamos la mano.

-Es empate, ¿qué hacemos?- dice Noah.
-Debe a ver alguna manera de desempatar...- digo pensando.
-¡Mimica!- dice Noah como un niño pequeño.
-¿Qué?- lo miro confundida.
-Mimica, el juego de imitar algo sin...- empieza a explicar y lo interrumpo.
-Se lo que es mimica amor, digo que es algo tonto... infantil- le digo.
-¿Acaso tienes miedo de perder?- dice Liam con una ceja alzada.
-¡Nunca!- digo y lo reto con la mirada.

Y aquí estamos... 6 adolescentes, en una sala, un viernes, jugando mimica... si, somos raros, pero así los amo y me amo.

Los equipos están dividos según las votaciones, Liam, Noah y Paul son un equipo, y Sam, Alan y yo somos otro
Hacemos piedra, papel o tijera para ver quien comienza y yo le gano a Noah, es decir, comienza mi equipo.
Tenemos 1 minuto para adivinar lo que está imitando el otro y el equipo que adivine más gana, además debemos ir rotando la persona, es decir, yo imito uno hasta que lo adivinen, luego pasa Sam y después Alan... así sucesivamente hasta que se acabe el minuto.

Comienzo yo mientras Noah lleva el tiempo. Tomo el papelito y dice "enfermera", vale destacar que debiamos imitar profesiones.

Empiezo a imitarlo, hago con mis brazos como si me estuviera colocando un... un... ay no se, esa cosa que es para oír el corazón... si, diganme bruta.

-¡Enfermera!- grita Alan.
-¡Si!- respondo y corro a sentarme, ahora pasa Sam.

Ella lee el papelito y comienza a bailar, o eso intenta.

-¡Stripper!- grita Alan y Sam abre sus ojos.
-¡NO!- grita y todos comienzan a reír.
-¿Actriz?- pregunto confundida sin saber que decir.
-¡Si!- dice emocionada y Alan y yo nos quedamos viéndonos.
-¿De cuando aquí las actriz bailan como strippers?- digo riendo.
-Ay cállense- dice molesta y pasa adelante Alan.

Alan hace como si estuviera cantando y al momento Sam y yo adivinamos.

-¡Cantante!- decimos al unisono.
-¡Si!- dice sentándose y paso yo, ya quedaba muy poco tiempo así que me apuro.

Leo el papel y dice "periodista", comienzo a imitarlo y veo que los dos están dudosos, pero por fin, segundos antes de que se acabe el tiempo, Alan adivina.

-¡Periodista!- grita Alan.
-¡Si!- digo emocionada.
-¡Tiempo!- grita Noah.
-Lo hicimos muy bien, suerte- digo burlándome de ellos y Liam me saca la lengua.

Los chicos empiezan a jugar mientras yo llevo el tiempo, primero pasa Liam, él hace una buena imitación de un bombero, pero los chicos tardan un poco en adivinar.

-¡Bombero!- dice Paul.
-¡Si!- dice sentándose y Noah pasa al frente.

Él lee su papel y empieza a bailar como un stipper.

-¡Stripper!- grita Liam.
-¡No!- niega y ahora empieza a hacer como una pros... no diré la palabra, simplemente empieza a hacer como si fuera a hacer el amor con alguien.
-¡¿Qué es eso?!- dice Paul alterado sin entender su actuación.
-¡Tiempo!- digo después de que tiene como una hora intentando decifrar lo que imitaba Noah.
-¿Que era?- dice Liam confundido.
-Secretaria- dice él y todos lo miramos confundidos- oh vamos, las secretarias siempre resultan ser unas perras en las peliculas que se acuestan con sus jefes casados- explica él y todos reimos.
-Perdieron- digo.
-¡Vamos a comprar trajes y vestidos!- dice Sam animada y Liam, Noah y Paul hacen cara de fastidio.

...

-Ese está bien- dice Liam con cara de aburrimiento.
-Emm... no, se me ve la cadera rara- dice negando el vestido 22 que se prueba.
-¿Qué dices? Se te ve igual que con los otros 22 vestidos- dice Liam confundido.
-¿Osea que se me veían las caderas raras con los otros 22 vestidos?- dice Sam ofendida.
-No, no amor. No quise decir eso... te ves hermosa con todos, te ves perfecta con todo mi niña favorita- dice él nervioso de volver a decir algo que Sam malinterprete.
-"Mi niña favorita" , ¿osea que hay varias niñas?- dice de nuevo ofendida.
-No amor, eres sólo tú- dice y ella voltea lo ojos.
-Entonces... ¿este se ve bien?- dice Sam sonriendo... bipolar.
-Si amor- dice Liam sonriéndo.
-Los hombres no lo entienden- dice bufando y metiendose nuevamente en el vestidor. Yo comienzo a reír, me da mucha risa ver la bipolaridad de Sam y como ellos pelean por eso.

Los chicos ya compraron sus trajes, solo escogieron uno y lo compraron, en cambio Sam y yo tenemos más de una hora probándonos vestidos... digamos que somos un poco complicadas.

-Aquí tengo uno para ti- dice Paul entregándome un vestido largo negro con diamantes y un escote en la parte de las boobies.
-Es hermoso- digo observándolo y entro al probador.

Me lo coloco y me miro en el espejo... es perfecto

-Voy a salir, creo que es este- grita Sam desde el otro probador.
-El mio también creo que es el elegido, a la cuenta de tres salimos- le contesto.
-Ok, 1... 2 ... y ... 3- cuenta Sam y las dos abrimos el vestidor a tiempo.
-¡Wow!- dicen los chicos al unisono.
-Son perfectos- dice Noah.
-Se ven hermosas- dice Liam.
-Me encantan- dice Paul.
-Esos son- finaliza Alan.

Sam y yo sonreimos y entramos a los probadores para quitárnoslos y comprarlos. El de Sam es un vestido largo dorado y tiene unas transparencias en el estómago con un escote en la espalda, es hermoso. Pagamos los vestidos y nos vamos de la tienda.

-¿Podemos ir a comer? Tanto ver vestidos me abrió el apetito- dice Liam haciendo una mueca.
-A mi también- dice Noah tocándose el estómago.
-¿Hamburguesa con papas fritas?- pregunto.
-¡Hamburguesa con papas fritas!- afirman todos y la gente voltéa a mirarnos raro.
-¡Ay ya, vuelvan a sus cosas!- digo a todos los que nos estaban mirando, me miran horrorisados con mi sutileza y después dejan de mirarnos.

...

Oh, Savanah!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora