Atrapadas en ¡League Of Legends!

Escápate

Narra Yukiko

Mire alrededor y Jess estaba hablando por teléfono y Noev se iba a quedar dormida. Cuando note que no me veían salí del cuarto, pero justo al abrir la puerta Kayn me tomo del vestido llevándome a la cama, parecía enojado. 

- ¿quien mierda me puso un aro?-Dijo el enojado.

- Yo-Dije sonriendo.

- ¿Quien mierda te dio permiso?-.

- mi tía me dijo que no te enojarías-.

- Debo hablar con tu tía un ratito-Dijo el muy enojado, le tire algo a Noev y despertó cayendo de la cama, Ella confundida me miro, le hice señas y se escondió bajo la cama. -Ekko, ¿y tu noviecita?-Mientras le preguntaba a Ekko ayude a Noev a escapar. 

- ¿que mierda pasa enana?-.

- Onii-chan te quiere matar por lo del aro, ¿No que no se enojarían?-.

- Ehm, bueno si se enojarían pero nunca pensé que tanto-.

- Destripo a Talon y tu creías que no-.

- Ya, ya, vamos , ¿que hago para que no me mate?-.

- Esperar a que se le pase-.

- Eso tardara años, ¿otra opción?-.

- Que yo lo tranquilice-Dije sonriendo.

- Pues hazlo-.

- No quiero, me mentiste-Dije cruzándome de brazos.

- Te compro dulces, cuantos tu quieras-.

- No, porque Onii me los roba-.

- Ehm, te peino en la noche-.

- Esta bien, me convenciste-Dije sonriendo. 

- Ve, ve, dime como te sale-.

- Okay-Fui al cuarto donde vi a Kayn salir, me transforme en Oppai y lo abrace por la espalda. - Oniii-chaaaan-Le dije para que me viera, el me miro y al instante se puso rojisimo.

- ¿que...quieres?...-.

- Quiero que me lleves a caballito-Dije sonriendo.

- Yo ehm...-.

- Porfiiiiiis-.

- Esta bien, sube-.

- Yey-Me subí a su espalda y el me sujeto, caminamos por toda la casa así, parecía que el no se cansaba. De repente vio a Noev escondida y se volvió a enojar como antes, me bajo de su espalda y lo agarre de la trenza. 

- ¡Au, Enana! -.

- Primero, no soy enana, y de segundo. Yo creo que te queda bien el aro, si no no te lo hubiera puestooo-Dije agarrándolo del brazo, el suspiro y dejo de hacer fuerza.

- Si tu lo dices-Parecía mucho mas tranquilo, lo abrace con fuerza y el me acaricio la cabeza. Sentí como sus frías manos me tocaban las orejas, mis mejillas ardían pero no sabia porque, el simple roce de sus manos me hacían quedar como Noev, roja como un tomate. No lo entiendo pero quizás son instintos. - Primera vez, que te veo tan roja-.

Sacudí la cabeza y le di un golpe. - Cállate..-.

- Noev, vamos donde Ekko, estaba buscando a su perrita sin correa-No entendí que significaba, pero Noev se abalanzo a el muy enojada a el, los mire esperando que acabaran, cuando de repente escuche un grito del cuarto. Ellos seguían peleando, fui arriba a ver que había pasado, vi a Ekko y Jess en el piso ensangrentados, y de repente para ver si estaban bien alguien me tomo de las orejas,me dolía demasiado, chille cuanto pude hasta que me taparon la boca. Todo estaba tan oscuro que no sabia quienes eran.

Narra Noev

Ya iban dos veces que me decía así, como si de alguna forma quisiera pelear conmigo. Maldito imbécil, simplemente le gusta verme enojada. De repente sentí un gran dolor en las orejas y Kayn se alejo de mi al escuchar como chillaba Yuki, se levanto y rápidamente subió. Y yo lo seguí, me dolían muchísimo las orejas, en un momento el dolor paro pero empece a sentir un dolor inmenso en el cuello, caí de rodillas muy adolorida. El dolor era tan fuerte que hizo que me desmayara, solo escuche unos gritos de hombres y vi oscuridad.