CAPITULO 13

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Yo quería hablar con él pero antes de decirle algo se acercó hacia mí y me susurró en el  oído - no te preocupes estaré un ratito e iré a verte para que me des
un beso de celebración - cuando se aparta de mi, me guiña el ojo y siguió caminando.
Es tan lindo nunca me cansaré de decirlo me encanta todo de el y más como me tiene locamente enamorada. Catalina interrumpiendo mis pensamientos me agarra un brazo y me tira hacia ella, la sigo y juntas nos dirigimos hacia nuestras casas.

Al llegar entro a mi casa veo a mi padre con la computadora portátil de seguro está trabajando, lo saludo y sigo mi camino hacia mi habitación me acuesto en la cama al segundo que apoyo mi cabeza en la almohada me duermo profundamente.

Al ver que el sol entra por mi cortina color rosa y da justo en mis ojos me despierto y recuerdo que de seguro Matías habrá venido a verme y nunca baje a recibirlo. Me doy una ducha salgo y me lavo los dientes a toda velocidad, decido ponerme un vestido color negro con una linda estampa de flores en mi espalda y por último mis zapatillas negras, en mi pelo me hago una coleta y llevo mi chaqueta de cuero porque hace un poco de frío está mañana.

El Peso De La VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora