CAPITULO 30

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Levanto la mirada enojada y exclamó - ¡Fíjate por dónde vas bruto! - cuando estoy cara a cara es Matías o por dios porque tengo que cruzarme con el o más bien chocarme.
Matías no dice nada solo me mira  y me sonríe después se va, quedo como idiota viéndolo noto que se va dónde está Eva y su familia pero no veo que allá venido su familia aunque no la conozca Matías me había contado muchos sobre ellos, saliendo de mis pensamientos me agarran de un brazo y dicen - Amanda ven deja de estar mirando gente que no vale la pena - esa  voz la reconocí enseguida era Cata me doy la vuelta y digo - ya se pero aún así no puedo dejar de verlo - mi amiga respira hondo pero no dice nada, me tira del brazo hacia dónde está su familia saludo cálidamente a su madre y padre, no puedo evitar ver como son dos gotas de agua Cata y su madre pero en cambio sus hermanas menores son iguales a su padre. Comenzamos a charlar son muy agradables sus padres y hermanitas, después de unos minutos le digo a mi amiga - Cata    me tengo que ir no me quedaré a festejar - Cata se sorprende y resopla diciéndome - oh ¿Porque? - yo me río ante su cara y contesto - es que mi padre no puede quedarse más tiempo tiene que viajar en unas horas por trabajo - ella entendiéndome me abraza sabiendo que después nos veríamos. No hago ni dos pasos que lo encuentro a Romeo me abraza y dice - ven que mi madre quiere verte -  lo sigo y sonrió, su madre es tan buena y siempre me quiso mucho. Al llegar hacia ellos veo a su madre que tiene en brazos al pequeño Joaquín, cuando ella me ve me abraza eufóricamente y me da una vuelta diciéndome - ¡Estás muy hermosa Amanda! - le sonrió y le respondo enseguida - ¡Gracias señora García! - ella me hace un gesto divertido y Romeo muere de vergüenza , es que la madre de él es muy bonita con una figura espléndida y eso que hace tan solo cinco meses tuvo al hermanito de Romeo y a él lo tuvo de adolescente en verdad parece su hermana mayor más que su madre. El padre de Romeo no está presente asi que le pregunto - ¿Y el señor García? -  a eso mi amigo contesta - no pudo venir esta en una reunión importante -  solo digo - ah -  después de una linda charla me despido de ellos muy veloz.

Justo cuando llegó al lugar donde se encontraba mi padre, se estaban yendo. Así que les digo divertida - que lindo se van sin mi acaso - mi padre se da vuelta sin hacer ni un gesto su rostro estaba serio y suelta sin hacerle gracia mi comentario - deja de estar de bromas Amanda yo tengo que viajar, ¡podemos irnos ya! - quedé en silencio y me límite a seguirlo hasta el auto.

El Peso De La VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora