capítulo 36.

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«JUSTIN»

Estar en un correccional no ayudaba en nada. Al contrario, destruía los pequeños logros que había alcanzado. El ambiente era pesado. Algunos guardias lo maltrataban. Sus "compañeros" eran más chicos como él: descuidados, abandonados por sus familias, desamparados. Parte de ellos habían sido de cierto modo, amigables, pero otro grupo se dedicaba a molestarlo y buscaban pelear todo el tiempo.

Le costaba ignorarlos. Respondía. Pero cuando se defendía, lo castigaban por meterse en problemas. Así qué se impuso como prioridad mantener buena conducta, de paso sumaría puntos a su favor cuando el juez volviera a hablar sobre la posibilidad de una pronta salida.

Había pasado casi un mes, pero le daba la sensación de que llevaba siglos encerrado. Extrañaba su antigua vida. Lo que tenía justo antes de declarar. Extrañaba a Lucy, a quién se había negado a ver tras descubrir el ambiente en el que estaba metido, queriendo evitar que ella se involucrara en ese sitio. No quería que lo viera golpeado o que se diera cuenta que recayó en la heroína.

Sí, recayó.

Uno de sus compañeros le ofreció un poco una tarde, a escondidas en el patio del correccional. Le dijo que su novia se lo pasaba a escondidas cada vez que lo visitaba. Le resultó extraño el detalle: Lucy jamás haría algo así. Pero aceptó, porque sus demonios lo atormentaban cada día más y la droga era la salida más fácil.

«LUCY»

—¿Qué te dijo Lainie sobre Justin?— preguntó Lucy, quién se había pasado el día esperando la hora del almuerzo para llenar de preguntas a su amigo Clay. Ya habían pasado tres semanas escasas de novedades y necesitaba saber.

—Si Clay, largalo todo— Zach también estaba sentado con ellos.

—No me dijo mucho— Lucy lo miró decepcionada. —Están intentando avanzar con el caso, pero el juez se niega a dejarlo salir hasta que no aparezca su madre o un tutor legal— explicó.

—¿Y qué? ¿Va a estar en el correccional por siempre?— Zach intervino.

—No, no para siempre. Mi mamá pidió una sesión con el juez, que será dentro de una semana. Va a pedir que revisen la situación. Puede que lo dejen ir, aunque mamá cree que será difícil. Pero lo intentará de todas formas— Jensen se dio cuenta que su amiga había bajado la mirada al piso. Se dirigió a ella. —Lucy. Mi madre de verdad está trabajando mucho para sacarlo.

—Lo sé. No lo dudo.

—¿Y si vamos a buscar a su madre?— ideo el chico de rasgos asiáticos. —Tal vez a nosotros si nos abra la puerta.

—No es buena idea— dijo y ambos la observaron sin creer que ella se había negado. —¿Qué?

—¿Por qué te parece mala idea?— preguntó Clay.

—Porque sí— no quería hablar sobre lo que había sucedido con el padrastro de Foley. No quería sumar más problemas. —Es peligroso. ¿O se olvidan que su padrastro es un traficante?

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Cerró el locker después de guardar sus libros y transitó el pasillo hacia la salida, deteniéndose a leer un aviso nuevo colgado a la pared. -"BAILE DE PRIMAVERA"- leyó, entre otras características como la hora y el lugar: era dentro de una semana y se realizaba en el colegio.

—¿Estás pensando en ir?— alguien preguntó. Lucy apenas volteó, reconociendo a Monty.

—No estoy de humor para ir a fiestas— dijo intentando sonar divertida.

Back to you ⇥ Justin Foley ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora