«Una Cita con Max Irons»

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-¿Lista?.-Preguntó Max a Emma, quien se encontraba emocionada por la cita con él. ¡Una cita con Max! Ella aún no lo cree. Pero bueno, ella sabe que sólo es por lo de La Lista Blanca. Pero aún así le emociona tanto.

- Lista.- Sonrió y Max la tomó de la mano y caminaron por el jardín directo al auto de Max, que se encontraba a unos pasos de ellos.

Ya en el auto, Max abrióla puerta del copiloto y Emma aún sonriendo entró al automóvil; Max dió la vuelta medio corriendo y entró también. Puso el auto en marcha y se dispuso a manejar. Emma  miraba por el espejo, mirando los lugares que pasaban. La radio del auto empezó a sonar la canción Classic de MKTO. Emma emocionada empezó a tararear la canción. Max la miró de reojo con una leve sonrisa.- ¿Te gusta MKTO?

- Si, solo dos canciones de hecho.- Emma lo miró y notó que Max se veia cansado, como si no hubiera dormido hace días.Eso la preocupó.

Luego de un largo silencio, donde ninguno de los dos se atrevía a hablar siquiera, solo la canción inundaba el momento incómodo, Emma trato de pensar en algún tema de conversación.- Asi que...¿Qué haces en tardes libres? Tonta.Tonta.Tonta.

Max sonrió y por un segundo la miró, luego dirigió su vista al frente.- Bueno, ¿Recuerdas el día que nos encontramos en la libreria del centro comercial?.- Emma asintió.- Pues...Leo. De hecho, me encanta leer, es como vivir cientos de vidas....

- ...Como Viajar a un mundo donde desearia vivir.- Dijeron al unísono. Se mostraron sorprendidos y luego sonrieron.

- ¿Lees también?.- Preguntó Max.Emma orgullosa asintio.- Pero que idiota, claro que lees.

- De hecho paso la mayoria del tiempo leyendo, o como has visto dibujando. Me encanta.- Emma miró a la ventana, notando que se acercaban a un camino empedrado que lleva a un parque. Max apagó el motor del auto y salió de el dando la vuelta y abriendo el lado de la puerta de Emma. Esta sonrio y salió del automóvil. Max tomó una venda y la puso en los ojos de la chica.-¿Qué haces?.- Preguntó Emma sonriendo un tanto curiosa.

- Dije que es sorpresa ¿No?.- Emma dejó que Max le vendara. Luego vió todo negro, sintió la mano de Max tomando la suya y guiandola.

- Ouch.- Emma sintió una punzada de dolor en su pie derecho y como los fuertes brazos de Max le rodeaban la cintura.

- Lo siento, una roca.

- No importa. Pero si tropiezo de nuevo Saukerl no la cuentas.- Refunfuño Emma fingiendo enojo.

- Esta bien Monita.- Max puso de pie a la chica y siguieron caminando. La curiosidad matando a Emma. Emocionada por descubrir lo que Max tiene planeado. Luego de unos minutos pararon de caminar y Max empezó a quitar el nudo de la venda que Emma tenia puesta. Al principio la chica vio borroso, cerro los ojos y los abrió varias veces para aclarar la vista; Sus labios se entreabrieron y sus ojos se agrandaron por la sorpresa. Max estaba ahora enfrente de ella sonriendo con una caja de regalo en sus manos. La caja era color blanco y el lazo que lo adornaba era de un color turquesa. Ella contempló el lugar preparado por Max. Estaban en un prado, repleto de árboles, flores rodeándolos, hermosas gardenias y violetas. Frente a ella habia una manta  estirada de cuadros blancos y rojos, encima de la manta habia una cesta color pergamino, y una guitarra a un lado.

- Un picnic.- Dijo la chica sin aliento. Emocionada. Pero al parecer Max no notó cierta emoción.

- Lo sé, yo..Se que esto es sencillo pero...- Emma lo interrumpió a medio hablar abalanzándose hacia el abrazandolo. El la rodeó con sus fuertes brazos y la apretó a su anatomia. Huele a rosas, pensó Max llenando sus fosas nasales del olor de ella. Le encantaba.

Catch my breath.- Max Irons (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora