Zootopia: Legado Salvaje

Cap XLI

POV NICK

¡¡JODER, SI!! Tenemos en nuestro poder los planos de la bomba. Logré obtener algo valioso y de paso pude darle su merecido a Eartone, ahora solo debemos mirar bien y saber cómo detenerla...

Lamentablemente...

¡No hay nada! Los mismos planos dicen que ya no hay ningún acceso hacia el interior del artefacto. Fue construida para no tener ningún acceso al interior, hasta los conductos que harán que se libere la droga por toda la ciudad (y viendo esto, tal vez un poco más allá) están totalmente protegidos. Sin tiempo para una investigación, no sabemos que hacer.

—¿Qué hacemos? —dice Briska desesperada.

—No podemos detenerla —dice Judy. —... Así que creo que habrá que... Bloquearla o algo, que explote pero sin el gran daño previsto.

—¿Y tienes alguna idea de como hacerlo? —replica Milton.

—Creo que si... —. Al decir eso, la mirada de la coneja decae. —pero no creo que les guste... Puede que funcione, pero no para nosotros cuatro...

—¡¡¿QUÉ?!!

El reloj de la bomba se ha activado... Nos marca un tiempo en minutos...

POV JUDY

En tan solo 40 minutos será el fin de Zootopia. Logramos herir a Eartone pero ya nos han superado...

Al parecer solo nos quedaba mi idea... Lograr apartar la bomba de la cima del edificio hacia una planta más baja, lo cual lograría que solo un par de manzanas de esta zona se contaminaran, y es una zona que ya se logró evacuar... con excepción de nosotros debido a el tiempo...

Milton, Briska, Nick, yo; entre los cuatro nos mirábamos angustiosamente después de comentarle mi idea, con certeza de que no había otra solución y que hasta aquí llegaríamos por el bien mayor.

—Entonces... es todo... — dice Briska.

—Será todo, pero, creo yo, será lo correcto — recalca Milton, ambos con una mirada baja.

—¡Esperen todos! —digo exaltada. Agarro mi placa de policia y la pongo en la mesa donde estaban los planos de la bomba, me quedo pensativa un segundo, intentando procesar lo que está a punto de pasar y lo que pasará con los demás cuando yo ya no esté en este mundo. Mi familia, mis otros amigos cercanos, ellos estarán tristes por esta acción, pero seguirán con sus vidas, eso es lo que deseo.— Ha sido un honor trabajar con ustedes.

Todos me miran perplejos, pero luego esas miradas cambian a unas llenas de valentía, coraje, determinación. Nick apoya su pata en mi hombro y con la otra deja también su placa en la mesa.

—También ha sido un honor... y un gusto —dice el zorro con una sonrisa.

—Lo mismo digo —acto seguido, lo hace la cebra con entusiasmo.

Milton saca algo de su bolsillo y lo observa con seriedad, me asomo para mirar qué es y no logro evitar derramar un par de lágrimas...

—Esta placa perteneció a un líder... un líder que se armó de valor para salvar a cientos, quizá a millones de animales de este mundo, algo parecido a lo que nosotros haremos —coloca con fuerza la placa de Bogo en la mesa.— ... no permitiré que ningún sacrificio sea en vano... pensandolo bien... Brisk, tu deberías irte, esto no es lo que Bogo hubiera...

—¡No!... Milton... Necesitan mi ayuda, seré un héroe como mis padres o mi tío lo fueron... necesito hacer esto.— Reclama Briska.

Aún me cuesta lo de Bogo, pero ya es momento de actuar.

—Muy bien, ¡en marcha!

Lo primero es atar a Eartone a una silla, solo nos cuesta una soga ya que con esa puñalada dudo mucho que llegue lejos. Ahora hay que recolectar lo que esta gente halla usado para desmontar la punta del edificio, aquí mismo hay unos martillos, unos taladros eléctricos y hasta una pequeña excavadora. Tenemos alcances eléctricos para conectar todo lo necesario.

—Hay que debilitar una parte de la mayor cantidad de plantas inferiores posibles, debemos hacer que este piso colapse y la bomba caiga hacia adentro. Si tenemos suerte, la bomba bajara lo suficiente para contener la propagación de la droga —digo fuertemente mientras todos trabajaban...

POV BRISKA

Conecto uno de los taladros eléctricos, este mueve mi cuerpo descontroladamente por su increíble potencia, pero si con esto desmontarlos todo este nivel, con certeza podremos quitar este suelo. Logró agarrarlo más firmemente y empiezo a rodear la bomba plantada en todo el centro.

Ya no puedo pensar en lo demás, es duro todo lo que ha pasado y mi destino no será el más deseado...

—¡Alto!

Un grito me asusta, era Milton.

—No te distraigas, no rompas todo el suelo, si solo cae este nivel sin haber roto otros inferiores, aún así la propagación será letal.

—Lo... lo siento... —que mal me sentía, si lo arruino, muchos más animales sufrirán. —Por más que no quiera pensar, esto es mucho para que mi estúpido cerebro lo mantenga en un baúl...

—Yo también tengo miedo... Aún puedes irte si quieres... —Responde el leopardo.

—¡No! Que no los dejaré... ¿a dónde más iría? Y... No quiero dejarte aquí... amigo.

Él me sonríe, definitivamente Milton es bueno escuchando, todo irá bien...

—¡Beep!

Que pa... ¡¿20 MINUTOS, ESO NOS QUEDA?!. El reloj de la bomba marca algo que nos intimida. No hemos avanzado mucho y no terminaremos a tiempo, taladrar y martillar no es muy rápido.

—Oh no ¿que hacemos? —pregunta Judy.

Todos pensamos, y tras un momento, se me ocurre algo.

—Un momento. Judy, Nick, ustedes llevan un rato más aquí, ¿no saben donde se ensambló la bomba?

—No, no lo... espera ¡Si!... Cuando estaba encerrada un infiltrado me dio información, me dijo que no sabía mucho de la bomba pero que habían guardias rondando el edificio con explosivos. Lo que quieres decir es que...

—¿Quieres decir que pueden haber explosivos sobrantes en algún lugar del edificio? —dice Nick para terminar de complementar lo que dijo la coneja.

—Y esos explosivos... Los podemos usar para tumbar los suelos. La bomba puede resistir los golpes, pero detonando algo sería un mayor riesgo... —dice Milton.

—Recuerden, cada opción es vital...

Todos asentimos a favor. Hallar los explosivos y detonarlos en suelos inferiores.

Nos dividimos para que sea rápido, ya que solo nos quedan 17 minutos...

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