Llegue al apartamento y me encontré con un sonriente Seung que me observaba más animado de lo normal.
-Appa!!- chillo el menor mientras yo atravesaba la sala –Omma se durmió-
-Si, por eso vine a buscarlos- solté viendo como Samantha salía de la cocina –Así que ve por tus cosas- el menor salió corriendo en dirección a una habitación.
-Ve con cuidado Seung- soltó Samantha, quien venía de la cocina –Kris lamento haberte llamado pero no sabía a quién más llamar- soltó la chica.
-No es ninguna molestia para mí- respondí y podía imaginar cómo los chicos debían estar bufando en la casa.
Ambos vimos como el pequeño Seung venía con su pequeña mochila y un par de juguetes en sus manos –Creo que es hora de despertar a la bella durmiente- soltó la rubia mientras yo negaba con la cabeza.
-No es necesario- solté acercándome al televisor en el cual vi la pequeña cámara puesta –Yo la puedo cargar hasta el auto, me da pena despertarla- logre ver como la rubia sonreía abiertamente mientras yo retiraba disimuladamente la cámara de aquel lugar.
-Qué lindo de tu parte- soltó la rubia en un tono totalmente meloso mientras me hacía señas para que la siguiese hasta una habitación.
Y ahí estaba ella, acurrucada abrazando un peluche de un oso entre sus manos. Se veía realmente adorable, por lo que la tome con sumo cuidado para no despertarla.
Camine con ______ en mis brazos y con Seung siguiéndome los pasos hasta llegar al auto.
Seung corrió hasta su habitación en la cual vigile que se pusiera su pijama y corrió a darme un beso en la mejilla para despedirse de mí.
-Dale un beso a omma por mí- musito el pequeño entre bostezos antes de meterse dentro de la cobijas.
-Está bien, ahora solo duerme- le sonreí y no le quite la vista de encima hasta que el cerros sus pequeños ojitos.
Salí cuidadosamente de la habitación y me encontré con una dormida _______, la cual estaba tirada en el sillón. La tome en mis brazos y la lleve hasta su habitación pero cuando la iba a dejar en la cama note el pequeño detalle de que ella estaba aferrada a mi cuello.
-No me dejes- murmuro mientras apretaba sus ojos con fuerza –Por favor no me dejes- volvió a gimotear mientras se aferraba más a mí.
-No te dejare- le respondí pero no había forma de que me soltara.
______ sonrió y luego se apegó más a mí.
Mi santo dios! Esta mujer me quiere matar.
Intente por todos los medios despegar sus brazos de mi cuello pero no hubo ninguna forma, bueno había una pero eso significaba que debería arrancarme algo de cabello o cortarlo y eso a las noonas de peluquería no les agradaría demasiado que digamos.
Por lo que decidí hacer lo que cualquiera de los chicos habría hecho.
Me recosté con ella.
~~~***~~~
-Hmmmm- musite mientras sentía mi mano y brazo derecho agarrotados.
Intente moverlos pero no podía moverme de ninguna manera posible.
-Hmmm- volví a musitar mientras mi frente chocaba con una dura capa de músculos.
¿Músculos?
Abrí mis ojos de golpe y me encontré con una hermosa vista. Ahí frente a mi estaba Kris, durmiendo con el rostro relajado y el cabello desordenado. Se veía realmente pequeño e inocente, cosa que realmente él no es.