Vainilla Y Otras historias

Besos

Ver morir al Sr. Masnari marco el final de todo para Claire. Mientras lloraba abrazada a Owen recordó los primeros días en el parque,  la confianza de su jefe, en sus palabras de apoyo. En todo lo que había aprendido de un hombre sabio que parecía tenerlo todo pero que muchas veces lo veía caminar solo a la orilla de la playa.

Owen intentaba calmarla mientras le secaba las lágrimas y la abrazaba para evitar que la tristeza la desmoronara. La miro a los ojos y sintió como si una fuerza lo empujara hacia ella –Vamos a encontrar a los chicos y vamos a salir de esta maldita isla- le prometió con una delicada sonrisa, demasiado atípica en su personalidad.

Claire asintió suspirando y rozo con la punta de su índice los labios del entrenador que se sonrojo volviendo a sentirse un extraño en su propia vida.

Cuando llegaron a un claro Zara, la secretaria de Claire le aviso que habían ubicado a sus sobrinos y que estaban en el edificio principal del complejo del parque. Owen dio con un cuadriciclo y subieron para emprender un rápido y desesperado viaje. No pudo evitar sentir la calidez de las manos de Claire sobre sus hombros y sentir confianza y ansiedad. Y preguntarse en forma casi de fantasías como seria la textura y la pasión de sus caricias.  

En al edificio principal del complejo del parque los pteranodones estaban atacando a las personas sin control. Por pocos minutos Claire no había llegado a ver morir a su secretaria Zara, se enteraría de su perdida con el recuento final de víctimas.
Todo pasó tan rápido que lo siguiente que Claire experimento fue tener un rifle entre sus manos para defender a Owen del ataque de una de las aves. El cuerpo le temblaba sin control y el aire escapaba de su cuerpo por la acción de la adrenalina en la sangre. 
Owen se puso de pie con su ayuda, y sin pensar en el acuerdo que tenían antes de que todo se volviera tan trágico, la beso con rudeza enfrente de más de doscientas personas. Por un breve instante, la sorpresa y la furia tensaron su cuerpo pero finalmente bajo sus defensas innatas y disfruto por primera vez en mucho tiempo de un gesto espontaneo.

Todo pasaba a demasiada velocidad para Owen que apenas intento dar una explicación por quebrar el acuerdo que tenían cuando Claire logro ver a sus sobrinos y separarse de sus brazos para comprobar que los chicos no estuviesen lastimados. Trato de parecer distante y recio en el momento en el que el sobrino más grande, que luego sabría se llamaba Zack, lo miro con desprecio y le pregunto a su tía quien era ese tipo que la había besado.

Claire, quien tenía siempre una respuesta para todo en su gran abanico de  variables a controlar, no sonó muy con convincente cuando dijo que era un compañero de trabajo. Mientras continuaban buscando un lugar seguro para los chicos, la ambición de Hoskins jugo su carta más arriesgada, al tomar el control de la operación de contención del indominux con Ingen, y utilizar a los raptores para neutralizarla.

Owen no necesito más que un insulto para saber que no iba a dejar a sus raptores en manos de la ignorancia militar de Hoskins. Mientras conducía a toda velocidad hasta la jaula, la mano izquierda de Claire toco su antebrazo en un gesto delicado de comprensión que le provocó una débil sonrisa.

La impertinencia de Hoskins ponía a hervir la sangre de cualquiera pero en especial la de Owen que convirtió su desprecio más profundo en una trompada. Claire estuvo a su lado con la misma intensidad física pero más bien verbal tratando de que la ambición de su empleado entrara en control pero este respondía a Ingen y ellos estaban por sobre su autoridad.

Owen no tenía más opción y si iban a a utilizar a sus chicas, al menos quería estar a su lado para protegerlas. La ferocidad de Blue y sus hermanas era proporcional a su desconocimiento de la vida exterior a la jaula y muchísimo menos, podrían llegar a interpretar, la maldad de personas como Hoskins.

Los sobrinos de Claire eran chicos extraños, en su escapada habían demostrado inteligencia y una capacidad de adaptación maravillosa y cuando se acercaron a la jaula a preguntar por los raptores exhibieron una curiosidad fuera de serie.

Owen estaba preparando la moto cuando percibió la familiaridad de las manos de Claire en su espalda. El pasillo de la jaula estaba parcialmente iluminado así que no necesito mirar en busca de personas cuando la tomo de la cintura y la pego a su cuerpo.

Claire acaricio su pelo con dulzura y con un débil susurro le suplico que tuviera cuidado. Él sonrió al descubrir que aun, el calor, la tierra, y el sudor no habían desintegrado el delicado perfume de vainilla que derretía sus sentidos. –Voy a cuidarme, lo prometo- le dijo con obediencia antes de someterse una vez más a la desesperación de besarla.

Claire se separó del beso provocando un sonido húmedo que la hizo suspirar –No quiero tener que ir a buscarte Grady- lo amenazo mientras intentaba en vano soltarse de sus brazos y sus manos que parecían querer llevarse la topografía exacta de su cuerpo recorriéndolo sin vergüenza.

-Volvería de entre los muerto por vos- le juro Owen antes de darle un último beso y escuchar como las bocinas anunciaban la partida de la cacería de la indominux.