Vainilla Y Otras historias

La Mañana De Navidad (Parte 4)

Owen detuvo la camioneta y bajó trastabillando completamente mareado. La luces de la patrulla se reflejaban el la nieve que había comenzado a caer. Tropezó con sus propios pies cuando vió a Max salir del trailer con una expresión seria y el sombrero en la mano.
-Es...es...es Claire?- susurró sin aliento, sintiendo el pulso detenido en pánico. Cayó de rodillas incapaz de soportar la realidad y agotado por el dolor del hombro dislocado. Comenzó a llorar y la realidad se revolvió ante sus ojos en un mareo que lo desmayó.

Dos horas antes...

El celular de Owen se iluminó y vibró. A desgano sacó la mano del calor de la cama y miró entre la bruma del sueño el mensaje. Gruñó y dejó el dispositivo en su lugar para volver a abrazar a Claire que dormía en su pecho -Ahhh estás helado- protestó sin abrir los ojos -Quién era?
Owen la estrechó y tardó unos segundos en contestar -Mel...está con Max recibiendo al perro recuperado...parece que...que al final el traslado se hizo...
-Tenés que ir?- preguntó Claire con tristeza.
-Si...se supone...pero no quiero.
-Owen
-Claire
-Tenés que ir...el perro puede ser peligroso...
-No quiero
Claire sonrió y se subió a su cuerpo para mirarlo acostada sobre su pecho -Y, si te espero con el desayuno?
-Y, si me quedó y me lo haces igual?
-Y si te hago cosquillas?
-No se te ocurra Dearing?!
-Que pasó con Claire?!...ah... no te gustan las cosquillas?
-Basta...no empieces una batalla que no podes ganar.
Claire le mordió el mentón y comenzó a hacerle cosquillas doblegadolo casi al instante.
-Ahhh basta amor...por favor...en serio...
-Tenés que ir...vas a ir?
-Ahhhhh...está bien...si...lo prometo
Claire acarició su frente y lo beso -Hago panqueques?
Owen sonrió con dulzura -Me esperas?... todavía es temprano y podes dormir hasta que vuelva...no pienso tardar.
Claire asintió y se acostó en el lugar que él acababa de dejar. Acomodó las manos bajo la almohada y antes de quedarse dormida sonrió al percibir los labios de Owen en su sien.
-Un día...no voy a tener más remedio que hacerte mí esposa...
Claire apenas abrió un ojo y lo vió sostener una sonrisa dulce al mirarla. La recorrió el miedo de que estuviese hablando en serio, de que no se tratará de una broma. Rió fuerte, sacudiendo los hombros, eludiendo el tema. Lo beso con mucha fuerza -Sos un tonto- le dijo y cerró los ojos para simular seguir durmiendo.