Vainilla Y Otras historias

Historias de Ciudad (Parte 9)

Owen escuchó la puerta y cerró el cuaderno. Se levantó del sofá y fue en busca de Claire que tenía la mirada más clara que antes incluso parecía flotar en sus labios el fantasma de una sonrisa. Él no quiso acercarse, quería respetar su enojo y sus tiempos pero de alguna forma sus ojos la impulsaron a hablar.
-Estuve con Peter- dijo para serle sincera, para exigirle la confianza que ella había encontrado en medio de la conversación del café con un ex novio por el cual no sentía nada. Para terminar de aclararle que no le importaba el lápiz labial o los mensajes porque era más importante amarlo que tenerle celos. Pero lo observó tan pálido, tan frágil que se arrepintió.
La expresión de Owen fue  transparente. Se notó de inmediato que algo en él se sacudió de forma incontrolable. Levantó una mano casi temblorosa porque ya no quiso seguir escuchándola. Se fue al cuarto, tomó una mochila y la bolsa de de dormir en silencio, guardo un poco de ropa y su celular. Claire lo siguió aturdida -Owen?...que?- intentó preguntar pero no le respondió, volvió al living, guardo el cuaderno y buscó sus llaves.
-Que estás haciendo?!
Owen se volvió con los ojos llenos de lágrimas -No merezco tu confianza pero pretendes la mía...que más puedo hacer?
-No es lo que pensas!
-Te dije lo mismo hace una hora y saliste hecha una furia a ver a tu ex novio...te amo más que a nada en este maldito mundo pero parece que todavía no lo crees...
-Owen, no...
-Voy a quedarme en el local para hacer las reformas...-se acercó y la beso en la frente.
Claire se aferró a su camisa -No, no por favor...
-Es mejor...te voy a extrañar...no voy a dejar de pensar en vos ni un jodido minuto pero es lo mejor.
-Owen...no...por favor...
La apartó de sus brazos y la miró -Me crees en lo que te dije antes?
Claire quería responder que sí, que podía creerle cualquier cosa pero las dudas sobre Andy y sobre la motivación por salir cada viernes a ese bar le eran tan extrañas que pasó demasiados segundos sin responder.
Owen sonrió con amargura y la beso una última vez -Te amo- dijo y salió del departamento dejando a Claire paralizada de tristeza.
Quiso correr detrás de él, suplicarle, arrastrarlo a sus brazos, besarlo pero otra vez el miedo de resolver cada discusión con un torbellino de sexo la frenó. Quizás él tenía razón y ambos tenían que volver a confiar en el otro al punto de no necesitar reconciliarse de esa manera brutal utilizando la combustión de sus cuerpos.