Back To you [NCT] (Cancelada)

When he looks at you

—Y entonces el príncipe salvó a su amado del castillo, regresaron a su casa donde fueron felices, comieron perdices y se durmieron.— TaeIl termino de contarle el sinsentido cuento infantil a la gran panza de Ten, que ya con ocho meses disfrutaba de una historia por parte del niño mayor.

—Creo que le gustó la historia Tae.— El menor sonrió y se apoyó sobre el vientre sintiendo a Nana moverse dentro.

Chittaphon arropó al más grande de los Seo en su cama despidiéndose de el y dejando que él se despida de Nana. Con mucha dificultad también recostó a JungWoo, teniendo que cambiarlo de cama.

—¿Terminaste aquí?.— Escucho una voz desde la puerta y se giró encontrándose a YoungHo con una hermosa sonrisa y MinHyung en sus brazos.

El menor asintió acercándose a él y robándole al niño de sus brazos quien se aferró con cariño al adolescente.

—Ya es hora de dormir Mark.— Canturreo y comenzó a tararear una canción de cuna para que se durmiera.

Cuando lo dejó en su camita se acercó al hombre alto que lo observaba desde el umbral embobado.

—Nana será muy suertudo de tener un padre como tú.— El menor se sonrojo y se abrazo al cuerpo del otro siendo solamente incomodado por su gran panza.

Fue un corto mimo que llegó a su fin cuando el más joven bostezo y le envío una señal al mayor para que dijera:

—Vayamos a dormir.— Ambos se tomaron de la mano para caminar a la habitación que ahora compartían.
Desde aquel beso las cosas fluyeron en gran medida, salían juntos, eran pareja, dormían en la misma cama pero aún no se atrevían a ponerle nombre a eso.

Se arroparon con las sábanas azules, el tailandés con la cabeza en el pecho de americano sintiéndose en paz con sus latidos y las manos de YoungHo sobre el vientre del menor, consolando al bebé que se ponía molesto cada vez que su portador de acostaba.

Se durmieron al instante, cada día en esa casa era agotador y ese no había sido la excepción.

Desde levantarse y atender a todos los niños hasta acostarlos y lograr que se duerman era un reto que esperaban acabé pronto.

Antes de finalmente dormirse Ten puso su mano sobre la de su compañero, dejando que Nana sienta los dos cálidos contactos.

4:07 am.

Fue lo que vio Chittaphon en el reloj cuando se levantó de por un extraño sentimiento en la parte inferior de su cuerpo, se sentía húmedo.

Se removió en su lugar y noto que efectivamente estaba húmedo.

—Lindas horas para querer nacer Nana.— Murmuró bajo y prosiguió a intentar despertar al dormido.— John.— Lo movió, golpeó y pellizco hasta que el mayor despertó levemente confundido.

—¿Qué ocurre?.— Su voz sonaba más ronca en la madrugada.

—Nana quiere nacer.— Le respondió, el alto tardó en reaccionar a lo que le decía.— Rompí bolsa.

—Oh dios, oh dios, oh Dios.— Repitió el americano saltando de la cama exaltado, poniéndose los pantalones y una camisa mientras el embarazado lo veía divertido.— ¿Qué haces? ¡Levántate! No pienso atender otro parto en la casa.

Ten se carcajeo, justo como el momento en el que el mayor le comento que había tenido a sus dos hijos en la casa, con el como partero por culpa de la obsesión de su antigua pareja con tener todo ordenado y limpio.

Finalmente se levantó, aburrido de los gritos histéricos de su novio.

—¡DoYoung! ¡DoYoung!.— Johnny corrió desesperado a la habitación del conejo donde esté leía un libro mientras DongHyuck jugaba con su cabello.— ¿Qué haces despierto?