#02 Aphrodisiac

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ᶜʰᵃⁿᵍʲⁱⁿ

Habían pasado ya treinta y dos horas desde que Changbin ingresó al hospital y sólo tres desde que está consciente del lugar donde se encuentra. Seo nunca fue lo suficientemente irresponsable como para chocar su hermoso Jeep contra un poste, así que cuando su padre encontró a su hijo moribundo en el asiento piloto, supo que todo estaba mal.

Seo iba solo, era ya media noche y no había ni un alma rondando en las calles solitarias de un distrito casi vacío, no estaba tomado y aún se desconoce la causa del accidente.

Una médico llegó cinco horas después de que Seo Changbin abriera sus ojos, anteriormente había sido visitado por algunas enfermeras pero ninguna había mencionado nada sustancial. La médico con el nombre de Sangah, revisó su historia clínica con una expresión seria y preocupante a los ojos de Changbin. Él tenía miedo de preguntarle cualquier cosa, especialmente porque nadie le había dicho nada y todo aquel que entraba a su cuarto tenía la misma postura tétrica.

Eso lo asustaba.

—Has dormido mucho, Changbin —dijo ella amablemente—. Descansa un poco más. En una hora comenzará el horario de visitas. Apuesto a que tu padre quiere verte.

Él asintió, sin despegar sus ojos de los ajenos. Cualquier movimiento en falso y él estaba preparado para saltar por la ventana.

—Oh, y, también, ingresará un compañero de habitación para ti, no seas malo con él; se ha roto algunos huesos.

Ella sonrió y trató de acariciar el cabello de Changbin, pero desistió cuando él se alejó bruscamente. Una vez ella se hubo ido, todo quedó en silencio. La televisión de la habitación estaba en mute; la ventana, abierta, era noche ya y el frío se colaba tristemente por las cortinas.

Changbin no era un chico normal, era retraído y totalmente asocial, un paranoico de primera mano. Se dejaba pisotear sin decir nada y mayormente su cabeza estaba en las nubes. A casi nadie le importaba que su padre fuese policía, todos sabían que él no le diría nada y se saldrían con la suya haciendo y deshaciendo cuanto quisieran. Siempre le dijeron que era pequeño, débil y estúpido; él prefería callar e ignorarlos porque así su vida era más fácil.

Su casa amplia, amplia en extremo, estaba solitaria la mayor parte del tiempo. Su padre se desvivía dentro de sus trabajos y no tenía una madre a la cual acudir. Changbin siempre estaba solo y desde los nueve años se crio prácticamente él mismo.

El resultado de ello era el actual Seo Changbin, un inútil adolescente sin amigos (así decía la gente) y propenso a ser el típico asesino de la clase en un ataque de locura.

Pero él no era así, en el interior él sabía que alguien algún día vería más en él y se interesaría en formar lazos. No le importaba realmente de qué tipo, Changbin sólo quería dejar de sentirse solo, pero no sabía cómo hacer que las cosas mejoraran.

Mientras Changbin miraba por la ventana hacia la acera, donde el poste de luz alumbraba a un perro tirado en el suelo, la médico y dos enfermeras llegaron a la habitación, ingresaron con un muchacho en silla de ruedas pero Changbin estaba más concentrado en ver cómo el pobre perro deliraba. Esperaba su muerte, inminente.

—Changbin, él es Hwang Hyunjin, ya le hablamos de ti, cuida de él por favor.

Changbin asintió sin despegar sus ojos del animal.

Who's NOT? ⸺hyunbin。2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora