Laboratorio

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—¡Ah!—El grito fue despiadado, les dolía. 

  —Basta, ¡Basta!—Johnny tapaba sus oídos.

Los hombres habían interrumpido su lugar de pediatría, se llamaba la sala "Dream", era un sueño tener a alguien como él de doctor en ese lugar de locos. Tenían amenazado al doctor, dos niños habían sido encerrados en una cabina sonora, los otros dos más solo veían con preocupación, hasta allí afuera se oía ese agudo sonido. 

  —¡Alto!— Uno de los niños más pequeños lloraba fuertemente, era un ruido feo. 

YMC había puesto un escaner de sonido sobre Mark y Woojin, el sonido era un pitido demasiado alto que lastimaba los oídos, YMC había utilizado la baja frecuencia para llegar muy lejos, un alcance a miles de kilómetros, esos ataques no eran directamente para los niños, era para quienes los protegían. 

Y dieron en el blanco. Jihoon y Minhyun se retorcían de dolor en algún lugar cercano. A los pequeños les dolía el sonido, excepto a uno. 

—¡No!   

Los pequeños se cubrieron los oídos, Mark y Woojin ponían oír ese grito. 

—¡Chenle basta!— Otro de los niños gritaba fuertemente.— Nos duele a todos. 

Los hombres armados retrocedieron y cerraron los ojos. Chenle tenía el poder de una voz ultrasonica, Un radar de ondas sonoras como los delfines. Ese era su poder.   

Johnny se levantó del suelo. Miró a los hombres. Estaba harto, él debía protegerlos.

—Niños cierren los ojos. 

Había cuatro en total, Chenle, Mark, Woojin y el pequeño Jisung. Los cuatro siguieron las ordenes del doctor que los atendía y jugaba con ellos, el doctor Seo nunca les había hecho daño, por eso lo apreciaban. Sabían que los salvaría.

—¿Qué nos hará doctor?— preguntó uno de los hombres armados sacando un arma de fuego. 

Le apuntó a la frente y sus seguidores hicieron lo mismo. El doctor estiró su cuello, estaba harto de ese lugar, de todas las injusticias que hacían. Hoy era el día del eclipse, el día en que debían ganar. El día en que debía ir por todo hasta el final.

Utilizó su poder. 

La piel del hombre malvado empezó a abrirse, por su nariz, por sus ojos y por su boca empezó a salir un líquido rojizo. Mucha. Por la cara de los otros hombres armados también. Johnny tenía el poder de controlar la sangre. Así que la haría salir por cualquier cavidad que se lo permitiera. 

—Vamos niños, no abran los ojos.—pidió y los tomó de las manos o cargándolos, y los sacó de aquel salón. 

No más de dos minutos después, la alerta del lugar empezó a sonar. Parece que los invitados habían llegado.   

*            

 SeongWu estaba listo para su última operación, le sacarían el corazón. Era el único lugar que faltaba y justo esa mañana había empezado a irradiar una fuerza increíble. Un cálido chispazo de vida y de esperanza.

Sentía que iba a morir.

Luhan había pedido que no se lo llevaran, pero uno de los guardias lo dejó inconsciente por la paliza que le habían dado, o le estaban dando, porque él fue llevado con Swing y ya no supo qué pasó. 

  —Has resistido bien.— Dijo cuando el hombre de la mascara se situó frente a él. 

Ong lo observó, nunca iba a bajar la mirada, a pesar de las heridas, el sueño y el hambre que tenía. Jamás iba a permitir que un hombre tan maldito como Swing tuviera poder sobre Ong. Nunca. 

Moon&Sun (OngNiel - W1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora