Moon&Sun (OngNiel - W1)

Segunda Orbe

4 de septiembre. 

  —El laberinto no está protegido con magia como Jihoon, me encargué de inundarlo cuando lo encontré— Explicó Jisung. 

Se alejó unos metros y entró a un lugar que servía de laboratorio en los tiempos donde experimentaban con niños. Allí había una entrada, en la que de nuevo tenían que bajar entre tierra. 

Se sorprendieron cuando llegaron a una parte de metal que obviamente Yoon había construido, parecía una enorme alberca. 

— Kuanlin— habló Jisung. 

Con el simple nombre, el joven entendió. Movió su mano y se formaron olas dejando ver un pasillo que llegaba a una puerta más grande, ahora con los jeroglíficos que tenía la misma que el lugar a donde el Park rosa los había llevado.   

  — Peguense lo más que puedan, no puedo mover mucho, así que iré quitando el agua por orden para que podamos pasar.— Explicó Kuanlin. 

 DaeHwi se pegó inmediatamente a él. 

  —No hay necesidad de eso— mencionó Daniel.— Tú abres, yo congelo, haremos un buen equipo— subrayó Kang. 

El joven solo asintió y sonrió. Era útil poder combinar los poderes.    

Como dictaba la biblia abrió el agua en dos partes, dejando un camino para que todos pasaran. Daniel solo congelaba todo a su paso. Sentía su poder más fuerte desde que hizo la primera esfera. Se sentía realmente bien. 

Kuanlin ahogó el hielo una vez que todos pasaron. Llegaron a la puerta, solo que esta vez no hubo problema, la abrieron a la primera, con la forma de pirámide que habían hecho anteriormente. 

Se llevaron una sorpresa al ver que la segunda orbe estaba al centro de un laberinto por el cual tendrían que pasar. 

Caminaron por mucho tiempo, hasta que notaron algo que realmente los interesó. Dos enormes ventanales de vidrio muy conservados. 

Agua.

Electricidad. 

Los dibujos los daban a entender. Jihoon apuntó a Jinyoung y a Kuanlin unos dibujos que estaban frente a una enorme puerta. Se estaban empezando a cansar de ese tipo de entradas. 

Kuanlin puso sus manos sobre el cristal, pero no pasó absolutamente nada. Jinyoung hizo lo mismo, pero de ese lado sus rayos se extendieron por todo el ventanal, la entrada comenzó a temblar como si se quisiera abrir. Bae dejó de intentarlo y la puerta se detuvo. 

  —¿Qué se supone que debemos hacer?— preguntó Kuanlin observando a Daniel. 

El policía no tenía idea, era la primera vez que estaba allí y todos lo miraban como si tuviera idea. Como si él supiera qué hacer, como si él fuera el hijo del sol. 

—No es agua, es lluvia, Jisung inténtalo— mencionó Ong observando los dibujos una vez más.   

Jisung colocó sus manos ante el ventanal y por todo el vidrio cayeron gotas de agua, usó más poder para crear una tormenta, el vidrio se inundaba rápidamente y la puerta del lado derecho comenzó a temblar. 

  —Jinyoung usa tu poder conmigo, al mismo tiempo. — pidió Jisung sin soltar su vidrio. 

Bae hizo su parte, los relámpagos empezaron a salir de sus dedos y cubrieron todo el ventanal.  

  —Parece que nosotros nos quedamos aquí, continúen por su cuenta— habló Jisung al ver que si soltaba la puerta se cerraría.   

Los otros nueve dijeron adiós y se perdieron en la penumbra.