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Recojan sus palomitas en este comentario, por favor. 🍿

Aquel tortazo pilló tanto a Jisung como a Seungmin por sorpresa. Apenas se dio cuenta de que le había golpeado hasta que el dolor recorrió su mejilla y por mero reflejo, se llevó la mano a ella. Miró con asombro a Hyunjin, quien tenía sus ojos puestos en Seungmin. Tenía los ojos afilados y la mandíbula tensada. Realmente daba miedo. Seungmin no se quedaba atrás. Devolvía la mirada a Hyunjin, con el ceño fruncido y los brazos cruzados. Todo ello pasó en menos de diez segundos. En ese momento Jisung sentía que sobraba. Y mucho.

— Que hostias te crees que haces.— Gruñó Seungmin. Jisung se sorprendió levemente por el vocablo usado, pero Hyunjin apenas le dio importancia.

— Estáis borrachos, luego os ibais a arrepentir.— señaló Hyunjin, tratando de sonar neutro. Seungmin soltó una pequeña risa irónica, haciendo que Hyunjin levantase la ceja.

— Eso quieres creer tú. Que pasa, ¿que no aguantas que me líe con otro? Pues que sepas que hago lo que quiera.— respondió mordazmente Seungmin, acercándose con lentitud a Hyunjin.

Este negó con diversión y se mordió el labio inferior, mientras buscaba las palabras adecuadas para responder. Aprovechando aquel silencio, Jisung salió lentamente por la puerta, cerrándola a su paso.

Soltó un suspiro en cuanto se encontró fuera y llevó su diestra a su mejilla, tratando de aliviar el dolor. El no sabía que su plan iba a terminar de ese modo, y desde luego se había esperado todas las posibilidades menos esas. Se recostó en la pared más cercana al baño y sacó el móvil. Esperaba ver algún mensaje de Félix, preguntando a ver que tal iba el plan, pero no recibió nada. Supuestamente habían quedado fuera del baño en cuando terminaran. Aspiró profundamente y luego guardó el móvil, esperándole. 

  — ¡Hey! ¿Estás solo?—   aquella voz sobresaltó a Jisung. Miró con algo de timidez a su derecha, encontrándose con un sonriente Minho. No pudo evitar soltar un pequeño suspiro, por suerte no iba a tener que entablar una incomoda conversación con un desconocido. 

  — Estoy esperando a un amigo.— respondió con una pequeña sonrisa, girando el rostro para verle. Al ver la cara de confusión de Minho, este se acercó un poco mas a el y repitió la frase en su oido, para que le escuchara mejor. Estaba a punto de terminar cuando sintió una pequeña caricia en su mejilla golpeada. 

Miro con sorpresa como Lee estaba analizando aquel golpe, sin decir nada. El mayor llevó su siniestra a la barbilla de Jisung y giró el rostro, dejando una mayor visibilidad de la mejilla amoratonada. 

  — ¿Quién te lo ha hecho? — cuestionó mientras tocaba levemente la superficie, sacando una queja a Jisung. Minho retiró la mano al escucharla.

— Es...Es una larga historia.— admitió Jisung. Realmente era larga; tendría que explicar cual era plan y todo lo demás. Demasiado largo para hacerlo.  Sintió la mano de Minho entrelazarse con la suya y un pequeño sonrojo recorrió sus mejillas, aunque se camuflaba con lo morado. 

Sin decir ni una palabra, Lee comenzó a llevar al menor por el pasillo de la casa, con una confianza que sorprendía a Jisung. Llegaron hasta la segunda planta y Minho abrió la puerta. Indicó con un gesto de mano que Jisung se sentara en el colchón, y este lo hizo. Jisung observó el cuarto con interés. Por la gran cama que adornaba el centro de esta, supuso que estaba en una habitación principal, o como mucho, en la de invitados. Minho salió del baño con un pequeño bote de crema y se acercó a la cama.

  — Perdón por haberte traído tan repentinamente, pero hay que actuar cuanto antes.— murmuró con suavidad, mientras se agachaba para quedar a la altura del rostro del menor. Abrió el bote y se hecho una pequeña cantidad en su dedo indice. Con delicadeza, comenzó a expender la crema por la mejilla, sacando de vez en cuando algún quejido a Jisung.— Esta muy rojo, quien te haya golpeado debe de haberlo hecho muy fuerte. 

Bad boys; stray kids.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora