Bad boys; stray kids.

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Los labios de Minho recorrieron los del contrario con lentitud, casi mimándolos. SUs lenguas apenas se habían rozado un par de veces, pues ambos jovenes creían que era demasiado pronto para ello. Sabían de sobra de sobra que la mitad de la sala les estaba mirando, pero eso poco les importó.

Traviesamente, Jisung mordió el labio inferior de Minho, haciendo que este se separara de él con una sonrisa. Jisung soltó una pequeña risa y recostó su cabeza en el hombro de este, repartiendo pequeños besos por la zona.

— Tu amigo me mira como si me quisiera matar.— murmuró Minho en su oreja, refuércenlo se a Felix.

— No es mi amigo.— Vale. Tal vez se había pasado con aquella frase, estaba medio borracho y enfadado por lo que acaba de presenciar. Con curiosidad, desvió su mirada hacia la esquina donde estaba Felix, y rápidamente puso una pequeña mueca.— Vamos arriba, me apetece beber algo.

Sin dar tiempo a ir respondiera, Jisung entrelazó sus dedos con los de Minho y subió las escaleras con rapidez, desapareciendo del campo de visión de Felix.
El menor se encontraba siendo abrazado por Changbin, de ahí la mueca que puso el pelirrojo.

— Me odia.— gimoteó el menor, en cuanto Han se fue. Deshizo la cara de enfado que llevaba encima y pasó a hacer un puchero. Se llevó varias palmadas en la espalda por parte del mayor. Changbin suspiró. Si el menor ya estaba insoportable antes de lo ocurrido, en ese momento le quería matar. Pero como era una buena persona, ahí estaba el, consolándole como podía.

— Lee,no te odia. Solo está enfadado porque nos ha visto besándonos, eso es todo.— murmuró Changbin en su oreja.— Y además, no estabais saliendo, ¿no?

Felix negó con la cabeza, secándose con una mano las lágrimas que recorrían sus mejillas. Era cierto que no estaban saliendo, pero aún así se sentía muy mal por lo ocurrido. Y además todo ello era por culpa de una maldita botella. Lee sintió los brazos de Changbin rodear su cuello con lentitud y como le acercaba a él. Apenas se conocían de una noche, pero el pecoso estaba asombrado por lo bien que le estaba tratando. La mayoría de gente que había conocido en su vida le había dejado tirado.

— Si no estabais saliendo, no tiene nada que echarte en cara. Es más, el también ha besado a a Minho delante tuyo. Y lo suyo que yo sepa no era una apuesta.— comenzó hablando Changbin. A cada palabra que decía, Lee asentía.— Así que habla con él cuando se haya calmado todo, y si te dice que no quiere, recuerda que hay más peces en el mar.

Tras decir eso, dejó un pequeño beso en la coronilla del menor, con algo de timidez, haciendo que una gran sonrisa iluminara su rostro a pesar de las lagrimitas. Felix se acurrucó levemente en el pecho de Changbin y cerró los ojos, intentando que el ruido y la tristeza se desvaneciera de su mente. Seo esbozó una pequeña sonrisa al ver al menor así y no pudo evitar abrazarle más fuerte. Cuando el mayor descubrió que el pecoso se había dormido, no pudo evitar esbozar una tierna sonrisa, mirando como su pecho subía y bajaba al compás. Por otra parte, Felix escuchaba el corazón de Changbin latir. Y sin que se dieran cuenta, ambos corazones se sincronizaron.

(...)

Seungmin se separó con lentitud del pecho del mayor. Llevaban unas dos horas en ese cuarto, sin hacer otra cosa que besarse o darse mimos. Porque extrañamente nunca habían tenido el tiempo suficiente como para estar simplemente abrazados o besándose cariñosamente.

— ¿Qué haces? — preguntó Hyunjin mientras se incorporaba hasta quedar sentado. Seungmin no respondió hasta que cogió el móvil.

— Hay que irse ya.— murmuró mientras miraba la hora. El reloj marcaba ya las cuatro menos cuarto, y si querían llegar a tiempo debían marcharse de esa casa cuanto antes. Con desgana, Seungmin cogió la primera camisa que pilló y se la puso.

— Bebé, esa es mía.— comentó con diversión Hyunjin, alzando una ceja. Seungmin le miró con una inocente sonrisa y negó con la cabeza.

— Ahora es mía. He decidido que me la voy a quedar de recuerdo. — comentó imitando el tono de Hyunjin.

El pelinegro negó con la cabeza, lamiendo el labio inferior al escuchar con qué picardía soltaba las palabras. Sin más remedio, cogió la camiseta de Seungmin y se la puso. No le quedaba como un guante, pero era pasable.

— Hay que encontrar a los otros.— comentó Hyunjin, y Seungmin asintió, estando de acuerdo.

Oh, pero todos estaban hechos un desastre. En cuanto bajaron al primer piso, se encontraron con Minho y Jisung comiéndose la boca encima de una butaca. Seungmin abrió la boca con sorpresa, pero la volvió a cerrar. Era mejor si no preguntaban nada.

En cuanto recogieron a la nueva pareja, procedieron a buscar a la restante. Esta vez fue Hyunjin quien se sorprendió, pues nunca creyó ver al malote de su cuadrilla abrazando y protegiendo tan adorablemente a un ser humano. Pero lo estaba haciendo, y no sólo eso, sino que un notable sonrojo se posó en sus mejillas en cuanto Felix despertó y le agradeció la ayuda con un beso en la mejilla. Una locura.

Por suerte no tuvieron problemas al llegar al internado. Seungmin se fue con Jisung a su cuarto, Minho con Changbin y Hyunjin tuvo que llevar con mucho cuidado a Felix, pues el menor iba tropezándose con todo.

— Joder Seungminnie.— murmuró Jisung en cuanto entró es su cuarto, tirandose en la cama. El nombrado le imitó, girando su cuerpo para verle.— Con tres. Me he liado con tres.

— ¿Con tres? — preguntó con curiosidad. Sabía que se había liado con él (obviamente) y con Minho, pero no sabía de la tercera persona.

— Felix.— respondió con simpleza. Seungmin iba a preguntar algo más, pero en ese momento Jisung se dio la vuelta y apagó las luces.— Buenas noches.

— Buenas noches.

The party is over, yay. ¡Y tengo nueva portada!

Muchísimas gracias por el apoyo que me estáis dando, realmente me inspiráis mucho para seguir escribiendo.
Y, seguramente  os habréis dado cuanta, pero en esta historia nada es lo que parece. Me gusta mucho improvisar y meter cosas inesperadas, me resulta divertido.
Bueno, que sepáis que esta semana igual no hay actualización de Bad Boys porque voy ha hacer una maratón en Amaranthine, ya que es Halloween (es una historia de vampiros).

Y no, Jeongin no está muerto.