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Otro día caluroso. Otra maldito día caluroso y el Bakusquad -a excepción de Mina- se hallaba nuevamente en una de las bancas del patio. Era la hora del almuerzo; y ya habían comido.

Bakugou y Sero volvían de ir a comprar. Sero traía dos helados consigo, al igual que el rubio.

Al llegar, el azabache le pasó uno a Denki, y Bakugou a le tendió uno a Kirishima.

—¿Para mí? —preguntó, con una sonrisa en su rostro, la cuál se ensanchó al ver a Bakugou asentir con un leve sonrojo en sus pómulos —Gracias, blasty.

—Cállate.

Cómo era costumbre, empezaron a hablar de cosas sin mucho sentido en realidad. Kaminari, que se encontraba a un lado de Sero, saltaba levemente en su lugar para dramatizar y dar énfasis a cada cosa que decía.

—Y me caí. —terminó por decir con un puchero en sus labios.

Kirishima comenzó a reírse junto a Sero. Bakugou seguía comiendo de su helado con una sonrisa burlesca por la desgracia de Denki.

—¡No se rían! —gritaba —Realmente quería conquistar a esa chica.

—Tú quieres conquistarlas a todas —comentó Sero, dejando de reír.

Y ésta es la parte en la que Kirishima se apega a Bakugou mientras Sero y Kaminari discuten sobre que debería dejar de acosar a todas las chicas que se cruzan en su camino.

—Hey, blasty. —le llama. Bakugou voltea a verle.

—¿Qué pasa?

—¿Sabes cuál es la diferencia entre un helado y tú? —dice Kirishima, mirando lo que le quedaba de helado con detenimiento, para luego hablar: —En que el helado me enfría, pero tú me calientas.

Silencio total. El rubio y Hanta controlaban su risa, pero, cuando Bakugou de puso de pie...

-—Ésta te va a calentar, imbécil! —gritó, abalanzándose sobre Kirishima.

Entonces los otros dos comenzaron a reírse a carcajadas.

—¡Uy, con gusto! —decía el pelirrojo mientras reía.

—¡Cállate idiota!

Gran idiota | kiribaku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora