¿Qué es el amor? ⟳ ᴊᴇᴏɴ ᴊᴜɴɢᴋᴏᴏᴋ

「020」

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—Eso es genial Jungkook.

—¿Tú crees?

—Jungkook ¿Por qué fingimos ese noviazgo?, ¡me sacrifiqué por ti! No lo hagas en vano. —sonreí para mostrar lo entusiasmada que estaba, como antes, tambien quisiera creerme eso.

—Gracias, enana.

Me obsequió una leve sonrisa antes de darme un abrazo, muy extraño de su parte ya que nunca lo hizo, pero aún así el  jodido estómago molestaba de nuevo, pero ya no es nada novedoso.

Ahora que lo pienso, no lo he mencionado antes pero ¿Estas son las supuestas mariposas, cierto? A la mierda, no quiero esos insectos en mi estómago.

—Yyyy, ¿por eso no fuiste a estudiar? —pregunté separándome de él.

Quería cambiar de tema y alejarme lo más posible antes que esos gusanos crezcan más. Jungkook rió y negó al mismo tiempo.

—No asistí a clases porque tuve una mañana especial con mis padres, es su aniversario y ya sabes, se ponen muy románticos.

—Dale mis felicitaciones —sonreí. Y creo que me desvié un poco de la conversación. La imagen de ellos abrazados y celebrando por un tiempo más juntos me daba una conmoción cálida y extraña.

La mano de Jungkook tocó varias partes de mi rostro y reaccioné ante el tacto, me observaba desconsertado.

—¿_____, eres tú?

Fruncí el ceño, pero desapareció lentamente cuando me fijé en su rostro, el cual se veí tierno, muy muy tierno para mí. Joder ¡Esto es tan hermo...

—¡_______!

—¿¡Qué!? —respondí de la misma manera. Se limpió la cara como si le hubiese caído de mi saliva.

—Ahora que me recuerdo —dijo, terminó de limpiarse y rodé los ojos, que exagerado es, se junta mucho con Jin— Suni me dijo que te agradeciera, no sé que hiciste pero me dijo que también te agradeciera así que, ¿gracias?

Me quedé callada un buen rato, hasta que simplemente asentí.

—Ah, sí. —mostré desinterés.

      

—Suni, espera —la hora de salida había llegado, salí lo más rápido para llegar con la pelirroja.

— ______ Ho—

—Sí —interrumpo a la chica— Mi respuesta es sí —no sé ni porque estaba con ella, respondiendole algo que no era mi decisión. Luego fruncí mi ceño. ¿Por qué mierdas digo sí como si yo fuese el novio?

—¿Sí? —indagó confundida. Quiero golpear mi frente pero no lo hago para no deshacer el momento.

—Suni, esta no es mi decisión, así que tómalo como una sugerencia. Dile que sí a Jungkook, no tengo problema con eso mucho menos contigo, y por favor no vuelvas a hacer este tipo de pregun...

La pelirroja se tiró a mi en un abrazo, y me susurró un pequeño «Gracias». No respondí, mi nariz me picaba y quería rascarla, ella es un centímetro más alta y sus cabellos hacían cosquillas en mis fosas nasales. Y por eso odio ser enana.

[...]

—Tae tenía razón, ¿porqué matan así a los pobres animalitos? —volví a quejarme.

Estaba en el sofá con las piernas cruzadas encima de este, y una manta cubriendondolas, viendo un documental que el calvillo dejó, y lo odio por eso, ya se le hizo costumbre esas tareitas.

Y oor su culpa terminé con un helado en manos y quejandome al ver como matan a las morsas.

—Odio a tu nueva ______, tan sentimental —mi hermano me miró raro, y, de pronto sus ojos se fijaron en mi helado. Alargó su mano para tomar la cuchara pero quité con rápidez el bote de helado evitando que eso pasara.

—Deja, es mi helado —espeté.

—¡Ya te comiste todas las galletas! ¿Qué más quieres?

—¡Sólo quiero deshacerme de estos mugrientos gusanos que me están jodiendo! —grité y me tiré de golpe a su pecho. Realmente no dolió, pero seguro que a Yoongi sí, pero no se quejó.

—¿Qué haces? —preguntó mirando como me sumergía en su pecho.

Me escondía, no quería que me viera lo fatal que estaba, además ¡estoy protestando por unos jodidos animales! ¡NO! No son jodidos, pobrecitos, los matan cruelmente y... ¡Mierda!, antes desearía que se los mataran e hicieran documetales más interesantes

— ______, ¿Qué gusanos, de qué hablas?

—Esos gusanos, en mi estómago, esos que hacen que Jungkook me guste.

—Ah, ya entendí —dijo sin importancia, alcé mi brazo y le dí un fuerte zape. Yoongi tenía que ser— Ya ha pasado una sola semana, UNA y tú sigues así, pensé que eso de tu nuevo enamoramiento iba a ser temporal.

—Gracias Yoongi, gracias

Me separé de su pecho y me puse de pie para irme a mi habitación a encerrarme. Caminé molesta hasta que llegué al descanso de las escaleras y me vi aún más molesta por ser tan idiota. Roté en el descanso y volví a dirigirme a la sala.

—¿Q-qué... —interrumpí a Yoongi y arrebaté el helado de sus manos y retomé mi camino hacia arriba— Pitufa —me llamó pero no me detuve.

El tarado se levantó y corrió hacia mi deteniendome del brazo y evitando que subiera las escaleras.

—¿Que quieres? —giré para verlo. Pero solo me fij en su pecho.

—Pitufa, deja de ser tan chillona. Ya ven aquí, tu hermanito te dará apoyo moral —fruncí el ceño mientras que él me jalaba y me envolvía en sus brazos.

—Te odio Yoongi, eres un malhumorado.

—Nah. No me odias —pegué mi cabeza en su pecho y lo abracé.

—Cierto. Yo te quiero —declaré, mientras que mis cortos brazos lo apretaban más, mergiendo todas mis fuerzas.

—¿E-en serio? —asentí.

Lo que dije era lo más sincero. ¿Hace cuanto no decía esas palabras? ¿En especial a Yoongi? Esto se siente realmente bien, abrazar a tu hermano no está del todo mal.

¿Hasta este punto llegan las persona con el embrujo que hacen llamar "estar enamorado"? En este caso Jungkook es la bruja de mi historia, apuesto que metió gusanos en alguna de mis comidas ¡o en las galletas!, y por su culpa me he puesto muy sentimental.

—Pitufa.

—¿Dime?

—Quiero ir al baño.

Puse los ojos en blanco. ¿En serio? ¿Ahora? Yoongi necesita un poco de gusanos o creo que le buscaré una Jungkooka para que lo cambie.