Volverme a enamorar |Jesús Oviedo|

Capítulo 25: Días sin ti... (1/3)

¡Buenaas!

Ya sé, raro que escriba al principio; pero sólo era para avisaros que muchas gracias por los comentarios y que voy a hacer maratón de 3 caps y... ¡segunda temporada!

¡Espero que lo disfrutéis! Besooos :*

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*Narra (TN)*

Un mes después...

Hoy, sigo aquí, al lado de la persona que más quiero en el mundo, aparte de mi familia, claro. Estoy con Jesús. Dentro de unos días empezarán las clases e iré al mismo instituto que los gemelos, el instituto Hipatía.

Jesús sigue sin despertar. En este mes no ha pasado gran cosa. La primera semana me quedé todos los días a su lado, sin separarme ni un segundo de él, pero me obligaron a volver a casa. Pero sigo viniendo, todos los días. Sigo con la esperanza de que despierte. Sigo llorando a su lado, recondando todos los momentos que he vivido junto a él. Algunas personas ya han perdido la esperanza de que despierte, pero yo no.

Dani también viene todos los días, aunque no tanto como yo, ya que se ha echado una nueva novia, Alejandra, o como le gusta que la llamen, Ale. Es super maja y guapísima. Es castaña y con los ojos verdes. Y se notan que se quieren un montón. Ella y yo nos llevamos genial, somos grandes amigas. En realidad, se la presenté yo a Dani.

*FLASHBACK*

Iba andando hacia el hospital, para ver a Jesús.

Pasando por un parque vi a una chica sentada. Estaba con el móvil, nunca la había visto por aquí. Me pareció verme reflejada a mí misma el primer día que vine. Seguramente era nueva en este pueblo.

Sin duda me acerqué a ella para saludarla. Se me han pegado las costumbres de aquí. Ya no soy para nada tímida.

Me senté en el banco en el que estaba sentada.

Yo: ¡Hola! ¿Eres nueva aquí verdad?

X: Ehmm sí, acabo de mudarme hoy.

Yo: No seas tímida anda. Me llamo (TN), encantada -le dediqué una de mis mejores sonrisas.

X: Yo soy Alejandra, pero llámame Ale, ¡encantada!

Yo: ¿Ves? Ya te vas soltando jajaja.

Ale: Bueno sí... esque soy un poco tímida...

Yo: No te preocupes, en este pueblo son todos muy agradables. Yo también he venido nueva hace ya más de un mes y ya estoy como si viviera aquí de toda la vida.

Reímos.

Ale: Vale, lo tendré en cuenta.

En esto es de que veo a Dani pasar andando por delante del parque.

Yo: ¡Daaaaani!

En seguida me ve y viene corriendo hacia mí.

Ale: ¡AAAAH! ¡ERES DANIEL OVIEDOO! -grita emocionada.

Dani: Sí, así me llaman -ríe.

Yo: Vaya, yo cuando te vi no me puse así.

Dani: Ya, pero eso era porque no me conocías.

Yo: Qué va, si era y sigo siendo Gemelier. ¿Por qué crees que os distinguía tan facilmente sin miraros las pulseras? -dije riéndome como una verdadera loca.

Dani: Oye, ¿y por qué no nos lo dijiste... eh?

Yo: Pues en ese momento porque creía que os iba a asustar de lo loca que estaba por vosotros, menos mal que no vistes como tenía mi habitación en Madrid...

Dani: ¿Cómo estaba?

Yo: ¡LLENÍSIMA DE VUESTROS PÓSTERS! -grité, dando pequeños saltitos -oye, me tengo que ir a ver a Jesús, Dani... quédate con Ale por favor, que es nueva en el pueblo.

Dani: Veeenga vaaale, vete a ver a tu novio.

Yo: ¡Graciaas tontoo! -dije dándole un beso en la mejilla -¡Ya nos veremos Ale! -dije despidiéndome de ella con la mano.

*FIN DEL FLASHBACK*

Ay, qué buenos recuerdos...

Le cuento todo lo que hago cada día a Jesús. No sé si me estará escuchando, pero bueno, igualmente me gusta que sepa la de cosas que están pasando a su alrededor. También, cada día, le digo que luche, que luche por estar con nosotros, porque le necesito, le necesito de verdad, aquí, conmigo, a mi lado. Le quiero demasiado.

Derramo unas cuántas lágrimas más solo al pensar el día en el que le conocí.

Le doy un pequeño beso en la boca y le susurro un "Te quiero".