02 | Lucas Wright

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Canción en multimedia: Count on me [Bruno Mars]

Capítulo 2

Lucas Wright

Lucas

20 de Octubre de 2019

Me despierto de golpe gracias a unos sonidos extraños que suenan a mi lado. Suelto un quejido y me giro con la intención de volver a dormir, pero ahora no son sonidos los que me impiden cerrar mis ojos, ¡esta vez es una persona que se acaba de lanzar arriba mío!

— ¡Despierta amigo mío, tenemos un gran y largo día esperándonos! —es Jacob. Lo reconozco por su voz, y además porque siempre suele despertarme de esta forma cuando viene a pasar la noche a mi casa.

—Sólo déjame dormir un poco más, son las... —levanto mi cabeza para mirar mi reloj despertador que tengo en mi mesa de noche a un costado de mi cama— ¡son las siete de la mañana, y además es domingo!

—Tú mismo lo has dicho, amigo mío: son las siete de la mañana. Ya es bastante tarde para todo, agradece que esta vez te he dejado dormir más de lo usual.

Al terminar de hablar sale de encima de mí y lo escucho caminar por mi habitación, pero no sé exactamente hacia dónde está yendo ya que volví a cerrar mis ojos con la esperanza de lograr retomar el fantástico sueño que estaba teniendo hasta que mi querido y lindo amigo me ha despertado. Y, de hecho, estaba a punto de lograr volver a dormir, hasta que siento que Jacob me toma de los pies y tira de mí para que salga de mi hermosa y calentita cama.

— ¡Hey! —me quejo levantando una de mis manos en forma de protesta, pero no me hace caso. Muy en el fondo sabía que no me haría caso, pero al menos no pierdo nada con intentar.

Jacob es así, generalmente le gusta mucho madrugar de forma extrema, y también le gusta mucho despertar a la gente que está durmiendo con él. No es como que esta última cosa me guste mucho, pero Jacob es mi amigo y lo quiero incluso con sus estúpidas madrugadas y todo eso.

—Vamos Lucas, el sol irradia energía hacia nosotros. Es una clara señal de que tenemos que aprovechar al máximo este maravilloso día que nos aguarda —aunque sí, a veces se pasa un poco. Generalmente está mucho más activo en la mañana y cuando recién se ha despertado, pero para la noche no le queda ni una gota de ánimo; es muy divertido verlo sentado y amargado a las once de la noche.

— ¿Y qué se supone que vamos a hacer hoy? —la pregunta sale con total fluidez de mi boca, lo que me sorprende considerando la hora que es. Mientras Jacob está más activo a estas horas, yo estoy casi que muriendo, literalmente.

—Cualquier cosa que salga, viejo —"viejo" es el apodo que solemos usar para referirnos al otro de una forma simpática pero cómica al mismo tiempo. Fue algo que el mismo Jacob propuso hace cinco años atrás, y que hasta el día de hoy seguimos utilizando.

Rápidamente me coloco de pie y me dejo arrastrar por Jacob hasta que llegamos a la cocina. Ahí es él quien hace el desayuno, como la mayoría de las veces que se viene a quedar a mi casa. Mi amigo se esmera bastante cocinando la primera comida del día, mientras que yo siempre preparo tostadas con algún tipo de jugo o café, pero Jacob no. Él prepara huevos revueltos, panqueques, batidos, y puedo seguir. En algún momento me propuse llegar a preparar un desayuno como los de él, pero después me di cuenta de que nunca iba a lograrlo. Así que aquí estoy, desayunando todos los días lo mismo.

El día de hoy toca un batido de frutilla con banana (frutas que habían en mi casa hasta hace cinco minutos), con dos waffles para cada uno. La verdad es que ni idea de en qué momento ha preparado todo eso, lo único que sé es que en algún momento de la vida cerré mis ojos, y al abrirlos de nuevo ahí estaba toda la comida frente a mí.

Obra del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora