Todo va a estar bien [Justin Bieber y tu]

Capitulo 20 | Tenemos que hablar | Maratón 2/3

____ POVs

Me dirigi a donde estaba Cazy y me sente a su lado, todos me miraban.

–Hola chicos. –Sonrei y trate de que mi voz no se quebrara. –¿Que pasa porque me miran?

Pregunte divertida, pero en realidad, mi corazón se estaba rompiendo a pedasos por dentro. 

–No nada. –Sono confuso ryan y yo solo le sonrei. –¿Comiste algo? –me miro, asenti.

Escuche sus risas en la picina, y si tenia que saludarlos, cerre los ojos fuertemente y suspire, deciando tener la fuerza suficiente para enfrentarlo y no morir en el intento.

–Hola Justin, Hola selena perdón por no saludarte, no te habia visto. –Sonrei como si fuera su amiga de toda la vida, ella solo me sonrio de mala gana, ¿Que no le caia bien acaso? 

–Ho-hola ____. –Me saludo Justin sonando temeroso. –¿Como va tu dia? –Sonrio, mirandome con una mirada que pedia mi perdon a gritos.

–De maravilla. –Dije animada.

Me di la vuelta, tome mi toalla y me fui a adentro, ahora si, secando las lagrimas que no pude contener. Subi rapidamente las escaleras y me tire en la cama de mi habitación

<Estan juntos y creo que esta es como la... no se cuantas veces, esta vez si duele, es mi casa> pense.

Estaba tan concentrada en mis pensamientos que me sobresalte cuando senti la mano de alguien tocarme el hombro. 

Me sente rapidamente para que no se diera cuenta que estaba llorando. –¿Que pasa? –Pregunte cubriendo mi cara en una especie de cortina con mi cabello.

–Se que estas llorando por lo de ahi afuera, pero... hey no tienes que sentirte mal, Justin es un idiota, solo velo, un dia esta con una y otro con otra, se que es tu idolo, pero el es asi desde hace un tiempo capas lo sabian si, pero debe ser duro ahora vivirlo más de cerca, ¿no? –Se sento junto a mi y me sobo la espalda.

–S-si. –Suspire. –En realidad, las beliebers sabemos como es Justin, siempre me dolio verlo con chicas que no era yo o cosas asi, y no solo a mi me duele, si no a millones de chicas, esta bien que piense en el, pero que no juegue conmigo. –Lo mire. –El quiere que lo perdone, pero siempre termina arruinando todo, en realidad ni siquiera se porque me preocupo, si el es mi idolo, y yo soy solo una chica que queria venir a cumplir su sueño y terminar el colegio, todo esto es tan tonto.

Solloce y tape mi rostro con mis manos. –Quiero volver a casa. –Logre decir entre lagrimas. 

–No ___, no digas eso. –Me abrazo y yo le correspondi. –Estar en una de las mejores universidades de canada es un gran previlegio, tienes un futuro asegurado, y no por un chico, vas a tirar todo por la borda o, ¿si? –Negue con la cabeza. –¿Entonces? No dejes todo esto, no hagas que Justin o cualquier otra persona te haga abandonar tus sueños nena. –Nos separamos y le sonrei. –Eres muy bonita cuando sonries. –Rio y cuando le iba a responder Justin entro por la puerta.

Me sobresalte y lo miramos.

–Necesito hablar con ____. –Dijo serio y tratando de esquivar cualquier mirada en la habitación. –Por favor. –Sono suplicante, pero al mismo tiempo tenia ese tono de superioridad. 

Chris me dedico una mirada de confianza y beso mi mejilla, yo le sonrei, aunque no entendia nada, vi como se iba de la habitación y luego fije mi mirada en Justin que estaba cerrando la puerta con seguro <¿Que carajos hace?> 

Se dio la vuelta, y poso su mirada en mi. 

–Tenemos que hablar. –Me miro suplicando, lo unico que hice fue ignorarlo y mirar un punto fijo en el suelo. –¿Vas a escucharme o no? –Sono enojado, pero aun asi no lo mire.

–Solo habla, antes de que me arrepienta. –Dije y me calle para escucharlo.

–Se que habias visto a Selena antes de que la saludaras, y se que te dolio pe...

–¿Dolerme? –Carcajee fuerte. –Justin, ¿Tu piensas que eso me dolio? –Ahora si lo mire. –Justin, cosas más importantes pueden dolerme, eso. –Señale por la ventana, dando a entender que remarcaba lo pasado hace unos minutos. –Ni siquiera llego a molestarme, tal vez seas mi idolo si, pero no todo lo que hagas tiene que dolerme, estoy... Estamos acostumbradas a verte con miles de chicas y que juegues con ellas, creeme, eso ni llego a llamar mi atención. –Menti.

Todo lo que dije era mentira. 

La habitación quedo en silencio por unos minutos, y luego hablo. –Esta bien lo entendi, solo no seas tan dura conmigo, eso a mi si me duele. –Sonrio debil y note que se le cristalizaron los ojos, quise detenerlo y abrazarlo para nunca soltarlo, pero mi orgullo como siempre, me ganaba por goleada.

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