Enfermos

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Totalmente Random XD

Espero que les guste~

Petición de: AliUribe01

Donald se da un ligero masaje en su adolorido cuello con una mano, dejando escapar un profundo y cansado suspiro. Había perdido la cuenta de las horas que llevaba despierto y en continuo movimiento sin descanso. Ir a su trabajo, volver para cuidar de los trillizos confinados al reposo, comer si es que había algo en la cocina y correr para ir a su otro trabajo, repitiendo esta rutina durante los últimos tres días. De alguna manera, cuando uno de sus pequeños se enferma, enseguida los demás le siguen. Respira profundo, esperando que no se notase el cansancio en su rostro, y entro a la habitación que los niños compartían. No es muy grande, con una cama grande para ellos, una pequeña mesa y dos muebles para la ropa.

-¿Niños?- los mira y no puede evitar sonreír ligeramente al notar que están dormidos, acurrucados entre ellos. Esta por irse a sentarse al pequeño sofá que tiene cuando lo escucha.

-¿Tío Donald?- se voltea al instante, encontrándose con que Louie esta sentado y rascándose ligeramente uno de sus ojos con el puño.

-Volviste- Huey es el siguiente en sentarse lentamente, mirándolo algo adormilado pero sonriendo ligeramente.

-¿Te quedaras?- Dewey no tardo mucho en imitar a sus hermanos. Los tres se ven cansados, con sus plumas blancas algo revueltas y con sus flequillos despeinado, sus voces rasposas y roncas. Están vestidos con remeras sin mangas de sus colores correspondientes.

-No quería despertarlos- se termina por acercar, acariciando la cabeza del pato de rojo y sintiendo una alivio al notarlo menor cálido. La fiebre había bajado por lo menos. -Si, me quedare- hablo después de unos segundos al notar las mirada curiosa sobre su persona. Los tres tosen casi al mismo tiempo. A veces, Donald no puede evitar pensar que ellos están sincronizados. -¿Quieren agua?- mira de reojo la pequeña mesita al lado de la cama, notando que la jarra que dejo antes ahora esta vacía.

-Por favor~- ellos asienten. El mayor agarra la jarra y sale de la habitación, yendo a la pequeña cocina que tienen para rellenarla. Camina a paso lento devuelta, enarcando una ceja al ver que Huey esta parado al lado de la cama y abrazando algo entre sus brazos.

-¿Qué haces fuera de la cama?- deja la jarra donde estaba, para después alzar al pequeño y sentándolo en la cama.

-Estaba buscando esto- le muestra lo que tienen entre sus manos. Es un libro de cuentos, el favorito de los tres solo por tener temas del espacia, aventuras y aliens con formas raras.

-¿Nos lees tío Donald?- los menores lo mirando son suplica y ojos brillantes, junto a grandes sonrisas en su rostro. Él no puede decirles que no a ellos.

-Esta bien- sonríe, notando como ellos se ven realmente emocionados. Les sirve un vaso con agua a cada uno, para después subirse a la cama y quedar entre Huey y Dewey, sintiendo rapidamente como los tres se acurrucan a su alrededor luego de dejar los vasos a un lado. Agarra el libro, se aclara la garganta y empieza a leer, sus pequeños relajándose contra él y durmiéndose a los pocos minutos. Dejo como pudo el libro a un lado, beso la frente de cada uno y se acomodo, dejándose llevar por Morfeo. Se quedaría con ellos lo más que podía.

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