Keane.

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Ese mismo viernes cerca de las diez de la mañana, Keane estaba perdido entre sus recuerdos sobre Harumi, y querer encontrar la forma de que Mitsuko levantara su castigo.

  ̶  Muchacho, ya te he dicho que dejes de fantasear y concéntrate, el lunes habrá mucho por hacer, aunque tu tendrás la suerte de librarte de tu primer día de clases yo tengo que trabajar.

  ̶  Lo siento señor, es sólo que... bueno no importa. Ya terminé con los formatos de las pruebas, ¿qué más tengo que hacer?

  ̶  Revisa que el programa para la estadísticas funcione    ̶  buscando entre sus carpetas    ̶  toma ingresa estos cuestionarios de control, y luego de que lo hagas correr haz los cálculos a mano para comparar.

  ̶  De acuerdo.

Mientras trabajaba su teléfono comenzó a vibrar, era un mensaje de su amiga    ̶  que hay chico guapo, ¿cómo va el trabajo?

Con una enorme sonrisa   ̶  que hay preciosa, lo mismo de siempre, mi padre cree que me deja cosas que no lograré terminar así que puedo tomarme mi tiempo.

  ̶  Jaja, deberías hablar con él para que mejor te deje salir cuando termines.

  ̶  No funcionaría, seguramente me pondría más tareas, oye ¿qué no Mitsuko te había quitado el móvil?

  ̶  Si pero no sé a dónde salió.

  ̶  ¿Yuzu te dio mi mensaje?

  ̶  Mmm ¿dónde decías que quieres terminar golpeado?

  ̶  Ten un poco más de fe en mi ¿quieres?, sé que encontraré la forma.

  ̶  Como sé que no puedo detenerte, al menos promete que no te harás el héroe y esta vez huirás a los golpes de mi hermana.

  ̶  Sabes que no puedo prometer eso, mejor tu prométeme que si lo consigo me haré merecedor a un beso tuyo.

  ̶  Mmm no sé si me convenga ese trato.

  ̶    ¬¬'

  ̶  Jeje sólo bromeo, por supuesto que te besaré si te veo antes de que acabe este fin de semana.

  ̶  Bien, eso me motiva aún más ;)

  ̶  Te dejo Keanicchi, al parecer mi hermana tendrá un encuentro cercano con su novia, debo buscar refugio.

  ̶  Jajaj ¿aún sigue frecuentando a Maruta?

  ̶  Eso parece.

  ̶  Ya deberían casarse, bueno corre, espero verte pronto.

  ̶  Jaja, ok yo igual :D.

Luego de esto el estado de ánimo del castaño mejoraba, terminó su encomienda en menos quince minutos y se arriesgó a pedirle a su padre el resto de la mañana libre.

  ̶  Bien largo, sólo porque tienes a todos muy contentos, el lunes pasaré por ti a las nueve en punto, espero no aparezcas con otro ojo morado.

  ̶  No señor, gracias    ̶  mientras salía corriendo, ya fuera de las oficinas    ̶  bien, no creí llegar tan lejos, ahora ¿cómo aprovecharé el tiempo para lograr mi objetivo?

  ̶  ¡Ya sé!   ̶  chasqueando los dedos   ̶  consultaré con la pequeña pelirosa, tal vez deba ofrecer algo a cambio pero no importa.

Teniendo la certeza de donde la encontraría, emprendió rumbo a la casa de Harumi, pero esta vez se fue entre calles para llegar desde un ángulo que sabía Matsuri no estaría vigilando.

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