[3 años atrás]
Narra Josephine
Estoy muy nerviosa, hoy es el día en que mamá me presentará a los hijos de su novio. Conozco a Peter desde hace unos meses, es un hombre muy agradable y cariñoso. Pero tengo miedo de como pueden ser sus hijos ¿Y si no les caigo bien? ¿Y si se ríen de mí?
Peter me ha dicho que no tengo nada de que preocuparme, ambos son buenas personas, aunque Alex tiene mucho temperamento.
Peter y sus hijos son de Inglaterra, pero se mudaron a Estados Unidos hace un tiempo, me ha explicado que sus hijos conocen las costumbres de aquí. Aunque estoy segura de que ambos tendrán un encantador acento inglés.
Mamá aparca delante de una casa con una moto aparcada delante. Es una casa normal, ni muy grande ni muy pequeña.
Salgo del coche y veo a Peter junto a una niña, tiene dos años menos que yo pero parece de mi edad. Peter me explicó que tenía un hijo de 17 años, pero no lo veo por ninguna parte. Me acerco con mi madre a su novio y su hija y Peter me recibe con un caluroso abrazo. La niña llamada Alex me mira con una mirada de enfado y no dice nada.
-Hola soy Josephine, pero llámame Jo'.-digo amable.
-Hola Josephine.-dice la niña.
No digo nada, su tono ha sido un poco cortante.
-Aún falta uno, espero que sea más amable.-dice Peter para aleccionar a la niña llamada Alex.
Se abre la puerta de la casa y veo a un chico.
Es un chico alto, metro 85 aproximadamente, ojos verde intenso, piel bronceada pero no mucho, pelo castaño con un pequeño tupé y labios rosados.
Viste una camiseta negra de Ramones y un tejano negro largo. Me fijo en sus brazos y sus manos y tiene tatuajes.Al instante se me seca la garganta y mis nervios aumentan notablemente.
Se peina el pelo con la mano derecha y con la izquierda le toca el hombro a su padre.
-Papá, he dejado encima el dinero de la gasolina.-dice.
Su voz es masculina y áspera, y tiene un acento británico súper atractivo.
-Muy bien. Te presento, esta es Meadow y su hija Josephine.
Josh asiente y ni siquiera me mira. Le da la mano a mi madre. Peter y mi madre nos dejan solos a los tres al instante y van al coche de mi madre.
-Hola Josephine, soy Josh.-dice.
Me agarra por la cintura y me da dos besos mientras me aprieta contra su pecho. Su olor es peculiar, aunque utiliza un perfume masculino común en él huele diferente. Me sonrojo al instante ¿por qué ha hecho eso? A mi madre le ha dado una apretón de manos.
Sé que en Europa la gente se saluda con dos besos, pero el vive aquí desde hace bastante tiempo y repito que a mi madre la ha saludado con un apretón de manos.
-Ho-hola. Soy Josephine.-digo tartamudeando.
-Ya, ya lo sé-dice con una sonrisa socarrona.
Me doy cuenta de lo tonta que estoy siendo, es un chico. Y ya esta.
Además tengo novio, se llama Joe. Es muy guapo, tiene mi edad y llevamos saliendo nueve meses. Perdí con él la virginidad, y no me arrepiento. Pero al ver a Josh siento un deseo incontrolable de tenerlo cerca, muy cerca. Mi novio es guapo y popular, pero Josh tiene otros aires.
Es mayor y se le ve experimentado, y si la moto que está aparcada es suya todo será aún mejor.
No digo nada tras su comentario y lo dejo atrás con su hermana.
Me subo en el coche y mi madre deja conducir a Peter. Ella va en el asiento de copiloto mientras que yo voy en el que está a la derecha.
Alex se va a sentar a mi lado cuando Josh le agarra de la parte trasera de la camiseta y la empuja hacia atrás acompañando el empujón de este comentario:
-Sal enana.
Se quiere poner a mi lado, eso mola.
Bueno no, no mola. No mola nada. Tengo novio y debo de respetarlo, soy muy feliz con él y tengo que borrar cualquier presencia de pensamientos lascivos sobre Josh en mi mente.
Rezo mentalmente para que mi madre no mencione que tengo novio.
Durante el trayecto mi madre habla con Peter sobre lo llenas que están las tiendas en las rebajas, mientras que Alex, Josh y yo estamos en silencio.
Peter aparca el coche en el parquing del centro comercial y todos bajamos.
Nos guían hasta una heladería y allí tomamos asiento en una mesa con sombrilla mientras mamá y Peter piden nuestros helados.
Josh y Alex se sientan juntos, yo estoy en el banquillo de en frente. Delante tengo a Josh. Es una situación muy incómoda, no sé si hablar o estar con el móvil.
-Y dime Josephine ¿Cuántos años tienes?-pregunta Josh.
-Quince.
Asiente lentamente con la cabeza.
-Preguntarle la edad es una forma muy mala de ligar, además papá nos lo dijo ayer.-dice Alex sin apartar la vista de un libro.
Josh se sonroja un poco y añade:
-No estoy ligando con ella, es una niña al igual que tú. Solo estoy intentando ser amable.
Que diga que soy una niña me ha dolido, bastante. Así es como me ve, como un bebé y no como una chica atractiva.
Alex rueda los ojos e ignora a su hermano.
Mi salvación llega en forma de mamá y Peter a la mesa y puedo evitar a estos hermanos tan raros.
Peter trae la bandeja con cinco helados, la deja encima de la mesa y toma asiento al lado de su hijo. Mamá se sienta a mi lado.
-Antes de comer hay que bendecir la mesa.-dice Peter.
Lo miro extrañada, en mi familia nunca lo hemos hecho. Y hacerlo en una heladería es extraño.
Peter añade:
-Estaba bromeando Jo', nunca hemos bendecido la mesa.
Alex hace ademán en meterse dos dedos en la boca y Josh enciende su móvil.
Yo sonrío con amabilidad y comienzo a comer mi helado. Josh apaga su móvil y Alex deja el libro.
Mi madre y Peter están tan enfrascados en su conversación que parece que no estén allí, con nosotros.
Miro a Josh, que ya se ha acabado su helado, y se relame el labio inferior.
Lo miro escandalizada y luego señala con su dedo mi labio inferior.
Me toco el labio torpemente y me doy cuenta que tenía una mancha de helado. Me la limpio con la servilleta y él me sonríe con picardía.
-Bueno ¿ Y tú qué estudias Josh?-pregunta mamá.
-Estoy haciendo ciclos formativos de varias cosas.
-Aún que no saca muy buenas notas.-interviene Peter.
Josh sonríe incómodo y luego su padre pregunta:
-¿Y qué tal tus notas Jo'?
Me limpio las comisuras de los labios con la servilleta.
-Muy bien la verdad, no me puedo quejar.-respondo.
Mi madre interviene:
-También hay que decir que está saliendo con un chico muy inteligente, llevan bastante tiempo saliendo y él la ayuda bastante.
Me pongo colorada como un tomate, no quería que Josh se enterara. Acepto que tengo novio y todo eso, pero que él lo sepa me incomóda.
Mamá y Peter dispersan otra conversación y nos vuelven a ignorar.
Josh me mira, levanta las cejas fingiendo sorpresa y a la vez abre los ojos exageradamente.
Tras unos veinte minutos eternos abandonamos la heladería y nos subimos al coche de mi madre.
No digo nada durante todo el viaje, mientras que Josh y Alex hablan de motos.
No me molesto en bajar del coche cuando se van a ir a su casa.
Mamá baja de su asiento y Peter también, Alex tarda un poco más pero se baja. Josh se está a punto de bajar cuando le cae un papel del bolsillo.
Lo voy a coger cuando su mano roza con la mía, tras rozarla Josh no se molesta en apartar la mano y acaricia la mía. La aparto rápido y él agarra el papel, me lo deja en la palma de la mano y me susurra:
-Por si te aburres de tu novio el quarterback.
Se baja del coche y me saluda desde afuera con una sonrisa socarrona.
Abro el papel y contiene un número de teléfono. Estoy a punto de tirarlo cuando una parte en mi interior me impide hacerlo.
Mamá se despide de todos con abrazos y yo intento no mirarles a la cara. Excepto a Peter, a él le saludo con mucho cariño.
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Stop Waffling
RomanceLa muerte de su madre no ayudó a suavizar su carácter. Alex Tiffin es una chica enfadada con el mundo, todo le molesta. No suele sonreír, cuando lo hace es porque ella misma ha dicho algo gracioso. De otro modo te mirará mal. Esto cambia cuando cono...