Acariciaba su labio inferior con la yema de mi dedo, estaban suaves y en un tono rosado que me hacía querer desearlo aún más.
Me acerqué hasta lo que pude para llegar a ellos, era evidente que esta corriente no era de nervios, yo sentía algo por él, quizás siempre lo sentí y me hice el tonto.
- Basta - me alejó.
- ¿Por qué te niegas?
- Porque no quiero.
- Tu cuerpo me dice otra cosa - volví a rodearlo con mis brazos - estás nervioso, estás temblando.
- Christopher, para - pidió.
- Quiéreme, quiéreme de nuevo.
Sus ojos miraban a los míos de una manera particular, lo necesitaba.
Volví a besarlo, esta vez no se detuvo.
- Porqué me haces esto - dijo en medio del beso.
- Eres mío, te quiero conmigo - contesté en lo que lo cargaba para guiarlo a la habitación.
Lo recosté en la cama sin dejar de besarlo, por momentos abría mis ojos para ver que los de él seguían completamente cerrados, estaba sintiendo, me deseaba, aún lo hacía.
Quité su polera que daba paso a su abdomen, esa piel que alguna vez recorrí con mis manos y que ahora tenía ansias de sentir.
Desabroché sus pantalones, su mirada estaba fija en cada movimiento que hacía.
Me ayudó un poco para deshacerme de la mía, estaba helado y eso hacía que mi piel sea invadida por escalofríos.
Mis labios dejaban besos por gran parte de su piel, ese aroma tan propio de él me seguía volviendo loco.
- Déjame entrar aquí - puse mi mano en la parte izquierda de su pecho - no te fallaré.
- Eres un poco grande, no sé si alcances - rió con ternura.
Ante el roce de nuestras erecciones, la temperatura comenzó a subir. Me acomodé bien antes de dar alguna embestida.
Tiró su cuello hacía atrás al sentirme dentro, no sabía si por placer o dolor.
- ¿Estás bien? - pregunté a lo que asintió.
Tomé sus manos en lo que embestía, sus labios ya eran más que míos.
- Erick - susurré.
- ¿Mmm...?
- Te quiero, nunca lo dudes ¿si? - no recibí respuesta, solo sentía su respiración algo agitada.
Mordió el lóbulo de mi oreja, sentí algo de cosquillas por lo que me moví algo extraño, comenzó a reírse y no pude evitar hacerle cosquillas.
- Ya ya déjame - dijo mientras reía - ¡Chris!
- Me dijiste Chris ¡Owww! - besé sus labios.
- Tonto - jaló mi cabello.
- ¡Hey! - me introduje fuerte por el jalón de cabello.
- Hijo de tu mamá - mordió mi hombro.
- Te adoro, con insultos y todo.
Costó que entre en confianza, luego de un buen rato se dejó escuchar, sus gemidos salían con dificultad pero ya no los ocultaba.
Lo noté cansado, ambos lo estábamos, dimos hasta nuestro último esfuerzo.
Besé su frente mientras acomodaba su cabello - estás sudando.
- Digamos que hace tiempo no tenía relaciones.
Me recosté a su lado cubriendo nuestros cuerpos, sentía alegría y creo que mi rostro lo demostraba.
- ¿Tienes sueño?
- Un poco - dijo poniendo su cara en mi cuello - me tengo que ir, se me hará tarde.
- Quédate, prometo que te iré a dejar temprano - propuse.
- Mmm...bueno.
- Duerme tranquilo - acaricié su espalda.
- Tendremos que tener una nueva conversación - dirigió su mirada hacia a mi - con términos mejores.
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Sin Vuelta Atrás - Chriserick (Segunda Parte De Cuídame)
FanfictionNo siempre es fácil revivir una historia. -NO SE PERMITEN ADAPTACIONES-