Sin Vuelta Atrás - Chriserick (Segunda Parte De Cuídame)

Epílogo

Ambos nos sentíamos orgullosos en estos momentos, nuestra Emma estaba obteniendo un logro más en su vida.

- No puedo creer que esté tan grande - dijo Erick viendo cómo nuestra hija recibía su reconocimiento.

- Creció, nuestra pequeña creció.

- En qué momento dejó de jugar con sus muñecas.

- Se está convirtiendo en mujer.

Esperamos a que la ceremonia termine, estábamos los tres esperando para felicitarla como correspondía.

- Hija - la abracé - felicitaciones, no sabes lo orgulloso que me siento de ti.

- Papá, muchas gracias. Otra etapa superada, viene la más importante, la universidad.

- Emma - quién la abrazó esta vez fue Erick - me alegro mucho por ti, ya no crezcas más por favor.

- Ay papá, gracias - depositó un beso en su mejilla - gracias a los dos por apoyarme.

- Hermanita, felicitaciones - le dió un abrazo - no quiero un cuñado aún, lo sabes ¿verdad?

- ¡Vicente! Yo no tengo que pedirte permiso a ti, te lo recuerdo. Pero gracias.

- Vamos a cenar - terminé por decir.

Hicimos una reserva en un lugar para festejar que uno de nuestros hijos había terminado parte de sus estudios.

- Casi quince años juntos, increíble ¿no? - dijo mientras íbamos tomados de la mano.

- Muchos años, siento que pasaron muy rápido, en un abrir y cerrar de ojos nuestros pequeños crecieron.

- Y nosotros también, ya dejamos de ser unos niños, la edad de a poco se nos empieza a notar.

- Estamos en un buen momento aún, seguimos igual que hace años aunque quizás con un poco más de líneas de expresión - reí.

- Tú más que yo eso sí - bromeó.

- ¿Me estás diciendo viejo Erick Brian?

- ¡Oh no! Pero como dicen por ahí, contra más viejo, más bueno - halagó - bastante bueno en tu caso.

- Coqueto.

Camino a casa íbamos haciendo planes entre todos para ver a dónde nos iríamos de vacaciones, éramos muy de piel y nos gustaba vivir todos los momentos que pudiéramos juntos.

- Papás - dijo Emma - ¿se puede sentar un momento?

- ¿Pasa algo? - pregunté.

- Necesitamos hablar algo con ustedes, un tema importante - habló Vicente.

Nos miramos algo confundido, nos sentamos juntos mientras ellos hicieron lo mismo pero frente a nosotros.

- ¿Y? - preguntó mi novio.

- Queremos pedirles algo, es muy importante para nosotros dos.

- Hablen, me tienen nervioso - contesté.

- Queremos cambiarnos el apellido, queremos llevar el apellido de ambos - respondió con una sonrisa.

- ¿QUÉ? - gritamos ambos.

- No griten - pidió - eso, queremos llevar los apellidos de los dos, yo el tuyo papá Erick y Vicente el tuyo papá.

- No es tan difícil de entender - habló el menor de los hermanos.

- ¿Vicente tú también? - preguntó Erick.

- Sí papá, mira yo sé que tuve a mi mamá, aunque la conozca por fotos siempre le tendré un cariño especial porque es mi madre, pero mi papá - se refirió a mi - ha sido quién me ha cuidado, todos los recuerdos los tengo con él, con ustedes dos.