Mi Amado Trancy❤•{Cielois}•

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Su grandioso salón de baile estaba listo después de tres días más, perfecto para su baile del día de hoy. Los aperitivos y las bebidas ya estaban listas, las luces estaban bien colocadas y todo estaba impecable, cada mesa estas colocada y había un gran espació para el baile.

_¿Todo listo, Hannah?.

_Sí, los invitados llegaran en una hora, todo esta preparado, primero unos bocadillos, después algo de baile y comida y para finalizar: palabras del anfitrión.

_¡Eso me gusta!.

_Son muchos los invitados, pero este es un salón muy grande, pero por si acaso, las puertas estarán abiertas para que se utilice el jardín.

_Ah~, mi precioso jardín.. Bien, los quiero bien presentables, usted es son invitados, contrate a unas personas que servirán en el baile, sólo guíenlos un poco y vallan por un traje a la tienda, el que más les guste.. ¿Entendido?.

_E.esta bien..

Unas cuantas personas con pulcros trajes negros llegaron hombres y mujeres, diez para ser exactos, suficientes para atender a las personas invitadas.

_Sólo guíenlos y pueden ir a arreglarse. Yo voy a hacer los mismo... ¡¡Atiendan bien y sean amables con todos!!

Grito a las chicos y se fue a su habitación para ponerse guapo.

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Ciel y su embarazada mujer estaban en el carruaje rumbo a el baile que organizó Alois, Phantomhive se encontraba muy ansioso, pues apenas lo había visto hace tres noches atrás y ya quería volver a verlo. Había pasando algunas veces por el humilde local de ropa y telas, y lo había visto sonriente, y sus bellos ojos azules brillando como aquella vez que lo beso, su rubio hablaba con sus trabajadores.. Tan lindo.

_Mira, mi amor._ llamó la rubia._ ¡esta magnífica la mansión!.

Y si, sin duda se veía magnífico.

_Sí, ¿pero qué tal el interior?.

_¡Oh!, estoy segura que sera hermoso, Alois Trancy tiene buen gusto.

Cuando el carruaje se detuvo y Sebastian abrió la puerta, ambos salieron y entraron por las enorme puerta de vidrio y marco de plata, subieron las escaleras y grande fue su sorpresa al ser recibido por Alois.

_¡Hola!, Conde y Condesa Phantomhive.. Ciel que guapo estas._ habló como si fuera se primera vez en verlo desde que había llegado, su vista se poso en Lizzy._ y tú.. Elizabeth Phantomhive, ¡estas preciosa!, el embarazo te sienta bien, pasen y disfruten, están en casa.

_Alois, tu estas divino, te sentó bien tu viaje y la edad, en verdad estas muy guapo.

_Gracias lindura, en verdad, tu también estas espléndida y, ¡wow! Tienes puesto mi primer lanzamiento de vestidos.. Hermosa. Bueno disfruten.

Se despidió por fin, en verdad Alois no mentía, Lizzy era y es muy hermosa, y con esa barriga Ciel debería sentirse orgulloso.
Por si lado, la pareja veía el bello arreglo de el salón, había varios adornos de plata, arreglos de bellas rosas, un bello piso de mármol, había una pequeña orquesta tocando las mas bella melodías, las enormes ventanas tenían las doradas cortinas abiertas dando una bella vista de el cielo nocturno estrellado y una enorme luna.

_Dije que estaría hermoso por dentro.

Dijo por último la rubia para ir al encuentro con sus amigas.
Alois había saludado a todos y cada uno de sus invitados, y ahora estaba ahí, viendo a Ciel bailando con su esposa, una ligera cicatriz salio en su muñeca, la sintió, era extraño. Según Hannah le dijo que esto salia como muestra de su dolor emocional, ya que no podía sentir más que un poco de empatia y unas cuantas emociones, pero también necesitaba amor y cuando no lo recibía y sentía algo de dolor la cicatriz aparecía, según la morena conforme controlaba más a la criatura sus emociones se recuperaban.
Suspiro y tomo el vaso se wisky bebiéndolo de un sorbo, su garganta ardió, un vaso no le haría daño, además no podía mezclar las bebidas o se embragaria mas pronto.