Mi Amado Trancy❤•{Cielois}•

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17:Ataques.
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Resumen Siete Años Especial)?
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La silenciosa calle hacia eco en los oídos de el  guardia. En el turnó nocturno era muy peligroso y por lo general se ofrecían de voluntarios aquellos hombres que carecían de familia cercana: esposa, hijos, nietos, padres, pero este no, el tenia una bella esposa y seis bellos hijos, pero al ser muy experimentado lo pusieron de guardia junto a su compañero de hace dos años, este sin familia y joven.

_¿Cree que vuelva a aparecer?.

_Quien sabe, pero hay que estar alertas.

Le dijo el señor a el más joven.
Desde hace más de cinco semanas, para ser exactos nueve,  gente había aparecido muerta en las calles Italianas, todos iguales: totalmente pálidos, sin un rastro de sangre en el cuerpo solamente en las escenas y con sus órganos totalmente podridos, eso si, sin ningún corte o un mínimo punto que indique por donde se drenó la sangre o causas probables de muerte, sin contar que sus ojos siempre eran desorbitados.
Un crujir se escuchó, seguido por un taconeo.

_Debe ser una mujer.

_¿Prostitutas?, señor.

Dijo el rubio con ironía pues el gozaba con los servicios de esas mujeres.

_Son damas sin importar a que se dediquen o cual es su nivel en sociedad.

_Tranquilo.

Guió su atención a un callejón, el estaba ahí, callado con sus ojos en llama negra, vigilantes y en su rostro una sonrisa.
Salio de el callejón presentándose ante los hombres, frente a ellos, su blanca ropa tenia unas pequeñas salpicaduras de sangre signos de lucha, su cabello rojo se mecía con la helada brisa y sin embargo era incapaz de sentir ese frío.

_Jovensito, es muy tarde para estar a altas horas de la noche.

_Probablemente sea un pecador, un desviado que da sus servicios.

_Calla, no sabes quien es y le insultas.

Alois lea vio fijamente, ajeno a sus palabras, camino asta estar cerca de el joven rubio dejando de lado a el hombre de cabellos castaños bañados de leve gris. Tan cerca como estuvo aspiró su aroma, no de su perfume, de su alma.

(Exquisito.. Mío.. Mi alma la necesitó.)
Se dijo y tomo  las mejillas contrarios bajando el rostro de el policía para quedar a una altura igual a la propia.

_Ve, probablemente lo sea pero.. Pero que diablos..

Las uñas se clavaron en sus mejillas, doloroso, y vio por primera vez esos profundos y negros ojos, eran aterradores, Alois pudo ver la vida de el tipo tan solo con verle. Bajo su mano derecha al abdomen de el joven y clavo sus largas uñas tirándolo boca arriba. El hombre cano sólo pudo ver hiper ventilando.

_Dejame.

_O.oye, alejate somos la autoridad.

Las uñas se enterraron hasta topar roca, sus dedos sentían la sangre y la carne desgarrada, tan lindo, sonrió. La respiración del hombre era muy errática soltando gemidos constantes por el dolor, con la mano en la mejilla del tipo le hizo verle  parpadeando un par de veces.

_Sigue me..

Susurró lento e inhaló por la boca y el joven exhaló ala par que Alois, entregándole voluntariamente su alma a el pelirrojo. La sangre en la boca de el joven y en el suelo desapareció y cuando las uñas de Alois salieron, un olor putrefacto inundó el lugar, el policía no vio nada.

_¿Que pasó?, ¿que hizo?.

El moreno solo lo volteó a ver mientras se paraba caminando hacia el. Le vio ladeando la cabeza de izquierda a derecha y viceversa.