El domingo por la mañana, Destiny se levantó muy temprano, tomando a Toretto, a Ruddy y a Rames para sacarlos a pasear, paso por primera vez y mucho tiempo, al despacho de Adam Walker, que estaba en él, escribiendo algo en pergamino, llevando lentes puestos, y una ropa bastante fuera de lo normal para un mago.
Era una gabardina oscura, debajo de ella una camiseta un gris algo mas fuerte, pero sin llegar al negro, y unos pantalones rectos de mezclilla. Se veía bastante juvenil, y muy misterioso, a comparación de como le veía en el coliseo, que se seguía viendo juvenil, pero con ropa mas animada y deportiva.
—Que sorpresa, Des —saludó Adam parándose de su asiento, con una sonrisa entre sus delgados y rectos labios—, creí que pasaría mas tiempo contigo, pero mejor mas tarde que nunca.
—¿Verme a mi? —bufó la chica, algo halagada, pero intentándolo disfrazar.
El chico, o hombre, se acercó a la chica, para agacharse y hacerle caricias a ambos perros, que se prestaron para que les rasquen la panza, y unos cariños detrás de la oreja.
—¿Qué necesita? —quisó saber.
—Necesito que me prestes una snitch —responde Destiny con una sonrisa algo sonza.
—¿No querras decir una quaffle? —le pregunta con una mirada inquisidora.
—No, una snitch —respondio tajante—, el puesto de cazadora no esta abierto en mi casa, pero quiero formar parte del equipo de quidditch una vez mas, aquí en la escuela, aunque sea siendo buscadora —el chico se mostro apenado por el comentario, por lo que fue a su gabeta, donde había un montón de cajas doradas, este tomó una y se la extendió.
—Contigo es siempre demostrar que puedes, ¿no es así, Des?
—Creo que si —comentó tomando la snitch con bastante cuidado la caja, este le dedico una sonrisa.
—Algun dia juguemos de nuevo, Des —le pide Adam, regresando detrás de su escritorio—. Uno contra uno, creo que le dire a un compañero que me venga a apoyar.
—Me encantaría, Adam... profesor Walker —se corrigio, aunque este niega.
—Somos amigos, me puedes decir por mi nombre, Des, yo no te ando diciendo Wright.
—De acuerdo, Adam.
A pesar del frio que habia, Destiny se fue a la cancha donde los de Ravenclaw entrenaban, la chica se quedo por un momento parada en su lugar, mirando a Eliot observar a su equipo, yendo de un lado hacia otro. Pudo notar que Roger le extendia una sonrisa, seguido por un guiño, la chica se limito a un simple saludo por la mano.
Luego Eliot, su alta figura se volteo a ver, logrando notar que sus ojos mieles brillaron al verla, este sonríe sorprendido, y luego derrotado, porque sabia que la batalla estaba perdida desde hace un tiempo. Asi que, metiendo sus manos en la blazer se acercó a la chica. Vapor salió de su boca.
—¿Tienes partido con las Arpias? —quisó saber, señalándole su escoba—, creo que preferirían que useas las saetas que nos dieron.
—No —niega algo inquieta, apartando la mirada de su rostro—, vengo a practicar para ser buscadora de mi equipo, pero no sabia que la cancha estuviese ocupada.
—No te preocupes —comentó Eliot bajando la mirada, hasta los dos perros que estaban junto de la chica, ambos conocían a Eliot, asi que fueron a saludarlo, girando sobre él y ladrando algo fuerte—. Me gusta verte, aunque no me veas a los ojos.
—Por favor Eliot, no empieces —soltó la chica alzando la mirada, y por viéndole al rostro—, te di la oportunidad, y no sabes cuanto dolio.
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Destiny y La Orden del Fenix (DEH #5)
FantasyDestiny ha cambiado, desde psicológica, hasta físicamente, los sucesos ocurrido el curso pasado, dejaron marca permanente en la chica, su habilidad de predicir el futuro se volvio una maldicion. Nuestra protagonista ha pasado un verano entre el Qui...