𝐅𝐢𝐨𝐧𝐚 © [F #1]

Capítulo 9

Good Guy – Eminem ft. Jessie Reyez

Es casi la hora de cenar cuando Fiona me devuelve mi pantalón de chándal y mi sudadera. Tras pasar toda la tarde charlando, no sé muy bien qué debo hacer ahora. No veo la hora de volver a casa, pero quién sabe si cuando salga del baño Fiona me abordará con otro tema de conversación. Podría ignorarla fácilmente, como suelo hacer en estos casos, pero ella sabe realmente de qué hablar para tenerme entretenido y pocas personas lo consiguen.

Antes de salir del baño, me pongo la capucha de la sudadera y compruebo cómo me queda en el espejo. Fiona sigue sentada en el sofá y está mirando su móvil. El televisor está encendido y el equipo de música apagado. Bajo la cabeza para mirar Brutus, quien se relame y mueve su cola al verme, y le acaricio detrás de las orejas.

—Terrence —me llama.

Dejo de acariciar a Brutus y le miro.

—Tristan y Jeff han propuesto cenar juntos en mi casa, ¿te apuntas? —Sonríe.

Puedo esperar cualquier cosa de Tristan. En cambio, Jeff no es tan capullo como para meterse en las bragas de las amigas de Kelsey, por eso espero que, como de costumbre, esté siendo el típico chico simpático que termina desterrado por siempre a la friendzone.

—Vale —respondo, encogiéndome de hombros.

No creo que venga nada mal un poco de vigilancia para estos dos. Quién sabe si Jeff pretende seguir los pasos de Tristan ahora que está soltero.

—Genial —responde y empieza a escribir en su móvil, probablemente, para avisar a los chicos—. Tristan y Jeff llegarán en veinte minutos —me informa sin apartar la mirada del móvil.

Asiento con la cabeza, aun sabiendo que no me está mirando.

—¿Qué te apetece comer? ¿Comida china, india, tailandesa, italiana, mexicana...?

Estoy indeciso ante su extenso repertorio, así que respondo que no me importa, estaré conforme con cualquier cosa. Ella se decanta por la comida tailandesa, la cual no he probado jamás. Fiona mira la carta de platos a través de la página web del restaurante y me recomienda lo que más le gusta. En seguida me decanto por el Cerdo Satay y ella pide lo mismo y una ensalada de papaya. Los chicos también están de acuerdo a la hora de pedir en un tailandés y, por mensaje, le dicen lo que van a querer a Fiona. Ellos llegarán poco antes de que nos traigan la comida.

Me quito la capucha y me paso las manos por el pelo. Está más crecido de lo que me gustaría, pero aún no he pedido cita en la peluquería. Siendo sincero, me daba una pereza terrible. La primera vez que me rapé, Tristan se burló de mí diciéndome que sólo lo había hecho para parecerme a Eminem, lo cual era falso. Al menos, descubrí que le gustaba más a las chicas con este corte de pelo.

—¿Tienes un tatuaje detrás de la oreja?

La pregunta de Fiona me coge por sorpresa, por lo que me cuesta procesar la información.

—Sí.

—¿Una rosa? ¿Por qué? —Pregunta con curiosidad, después de haberse inclinado para verla mejor.

Es una pequeña rosa con un fino tallo lleno de espinas. Es únicamente su silueta y así quise que fuera.

—Fue uno de los primeros, no tiene mucho significado realmente —confieso.

—Vaya... —Dice como si no supiera qué otra cosa responder, pero sin borrar su sonrisa—. Me gustaría hacerme uno algún día. También me gusta detrás de la oreja. ¿Duele mucho?