S E V E N

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Jimin apresuraba a escribir en aquel cuaderno que ya había forrado con anterioridad, trataba de ser lo más detallista posible, le gustaba poner los detalles a todo lo que hacía, inclusive a veces él mismo sentía que se excedía demasiado, pero al ver la sonrisa y los cumplidos que le daban, se ponía de lo más contento posible.

Yoongi estaba acostado frente a él, estaba con sus ojos cerrados, disfrutando de solo escuchar a Park Jimin escribir las líneas de aquel diario, ¿quién diría que un trabajo como esos lograría juntarlos un poco más? Yoongi se la pasaba casi todo el tiempo en casa de Jimin, inclusive le sorprendió que los padres de Park lo tratasen de manera tan cálida.

Tal vez no estaban conscientes de lo que tenía en realidad.

El pálido abrió los ojos y observo de reojo a Jimin que seguía muy concentrado en su escritura.

- No les has comentado ¿verdad?

Jimin dejo de escribir en cuanto escucho la voz de Yoongi, lo miro.

- ¿De qué hablas?

- Tus padres -dijo Yoongi para después mirar el techo-, no les has comentado, ya sabes sobre..

- No, no lo e hecho, ni planeo hacerlo.

- ¿Por qué?

Los padres de Jimin eran algo especiales a la hora de conocer más a fondo a sus amigos, sí les decía algo sobre Yoongi, tal vez no lo tomen muy bien que digamos, es más sabía que posiblemente hasta ellos le prohibirían que lo volviera a ver.

- Creo que no comprenderían.

- ¿Alguna vez no te comprendieron?

- Hubo solo una vez -Jimin dejo el diario a un lado de él-, la vez que les mencione que soy homosexual.

Yoongi no esperaba aquellas palabras de parte de Jimin, ¿en verdad era homosexual? Él pensaba que a ese chico de hermosas mejillas esponjosas le iban más las mujeres.

- ¿Qué sucedió?

- No he tenido algún novio ni nada parecido, pero sí me gustaba un chico, no recuerdo muy bien su nombre, cada que me lo decía casi siempre lo olvidaba. Él un día vino a mí casa, teníamos que realizar un trabajo especial para obtener más puntos en nuestra calificación, yo en verdad estaba loco por él, con decirte que apenas y me hablaba o miraba me ponía tan nervioso, aunque creo él no lo notaba, solo me decía que me veía adorable.

>>Esa vez habíamos terminado el trabajo temprano, y él quería hacer algo más como jugar video juegos o platicar un rato viendo una serie o película, accedí a ver la película, pero era una película romántica, le encantaban aquellas películas, a mí... no mucho, cuando la mirábamos todo era perfecto, hasta que se besaron los protagonistas, sentí como la boca se me seco al instante, no sabía porque, mi vista se poso en él, estaba atento a aquella escena, mis ojos viajaron a sus labios.

>>Tenía el valor suficiente para besarlo, estaba seguro de aquello, así que lo hice, lo bese, fue en ese preciso momento en que mi madre entro ofreciéndonos bocadillos, sus ojos se abrieron como platos al vernos, me separe bruscamente de aquel chico, mi madre había tirado el plato con los bocadillos y él me empujo para que me quitará, ese fue el primer rechazo que recibí en mi vida, recuerdo que me dijo que él no era un vil marica como yo, y simplemente se fue.

>>Desafortunadamente recibí el regaño de mi vida, gritos, solo gritos era lo que escuchaba, apuesto a que se podían escuchar por toda la calle, en fin, dijeron que me aceptarían, pero que no tolerarían que trajera a otro chico solo para besarlo, no quieren que esté aquí con un chico a menos que sea mi amigo, sí descubriesen que es mi pareja, me matarían.

- Woa, nunca pensé que algo como eso te pasaría -Yoongi se veía muy sorprendido-, es casi similar a lo que me ocurrio.

- ¿Eres homosexual?

- Sí lo soy, con más razón mis padre creyeron que me había contagiado de otra manera, pero al decirles lo que ocurrió realmente, creo que se sintieron tranquilos, ¿sabes? En mí vida no me ha gustado alguien en verdad, ni siquiera un beso he podido dar. Tal vez algún día lo haga, pero tendrá que ser en verdad alguien muy especial.

- Te aseguro que lo encontrarás.

Jimin muy en el fondo deseaba que él fuera aquella persona especial, desde que había visto por primera vez a Min Yoongi, supo que podía ser alguien perfecto para él, y por eso a estado casi todo el tiempo con ese chico de piel como la porcelana, le gustaba, claro no se lo diría, todo iba a su tiempo, sentía que sería muy apresurado sí se lo dijera.

Park sabía a la perfección que tal vez no logré algo con Min Yoongi, pero valía la pena intentarlo y más porque estaba muy consciente de que posiblemente no lo tendría por mucho tiempo, a veces el destino era tan cruel, a las personas que debería dejar en esté mundo se las quiere llevar, mientras a las que no lo merecen se quedan, la vida es algo injusta, pero a la vez maravillosa, en verdad que Jimin agradecía haber conocido a Min Yoongi.

Yoongi también pensaba lo mismo, después de que todos lo habían literalmente mandado al demonio, por fin podía conocer a alguien que le daba la oportunidad más grande, y eso era vivir sin estar excluido, sin temer a que los demás escapen de ti, estar con alguien para platicar alguna nueva experiencia, estar al lado de alguien que puede mostrarle que la vida es hermosa.

Park Jimin en verdad que estaba ganando un lugar en el corazón de Min Yoongi, y uno muy grande, y Yoongi sabía que se lo merecía en sobremanera.

White Flowers ||YoonMin||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora