El secreto de Josue

**Capitulo 20: Secretos y Culpa**

En la tranquilidad de la casa de Neftalí, Josué finalmente compartió la verdadera historia detrás de lo sucedido con Yasser, revelando que su amigo José estaba involucrado en la tragedia. Neftalí estaba conmocionado por la revelación y preocupado por la seguridad de Josué.

Neftalí: (preocupado) Josué, esto es muy grave. Si José está involucrado en esto, podrían descubrirlo en cualquier momento. Y si tú lo sabes, podrían acusarte de ser cómplice.
Josué: (con lágrimas en los ojos) Lo sé, Neftalí. No sé qué hacer. Me siento atrapado en esto y tengo miedo de que las cosas empeoren.
Neftalí: (serio) Debemos pensar con cuidado. Lo que sea que decidamos, debemos asegurarnos de que tu seguridad y tu integridad estén en primer lugar.
Josué: (angustiado) Pero si hablo, José amenazó con hacerme daño. No sé si es capaz de cumplirlo, pero tengo miedo.
Neftalí: (decidido) Escucha, no podemos permitir que siga amenazándote. Debemos buscar ayuda y tomar decisiones que nos protejan a nosotros y a los demás.
Josué: (inseguro) ¿A quién podríamos acudir? No quiero que nadie más salga lastimado.
Neftalí: (pensativo) Podríamos buscar asesoría legal o hablar con las autoridades en algún momento, pero antes de eso, debemos asegurarnos de que estemos seguros. No podemos enfrentar esto solos.
Josué: (suspirando) Tienes razón. No puedo seguir ocultando esto y viviendo con esta culpa. Pero también tengo miedo de lo que pueda pasar.
Neftalí: (amigo) Vamos a tomarlo paso a paso. Primero, asegurémonos de que estemos protegidos. No salgas solo y mantente en contacto conmigo. Vamos a buscar la forma más segura de manejar esta situación.
Josué: (agradecido) Gracias, Neftalí. No sé qué haría sin ti en este momento.
Neftalí: (sonriendo) Somos amigos y siempre estaremos aquí el uno para el otro. Ahora, vamos a descansar y pensar en cómo manejaremos esto juntos.

La noche avanzó y Neftalí se quedó en casa de Josué para que ambos se sintieran más seguros. Mientras tanto, la noticia de la tragedia se extendió por la universidad y entre los amigos de Josué. Johanne y los demás estaban consternados por lo sucedido y se preguntaban cómo pudo haber pasado algo así.

Johanne: (preocupado) No puedo creer que alguien haya matado a Yasser. Era un buen chico.
Guissel: (angustiada) Sí, lo conocía desde hace tiempo. Era amable y no se metía en problemas.
Idania: (conmocionada) Deben estar investigando intensamente. No puedo creer que esto haya pasado aquí.
Louis: (triste) No puedo evitar sentirme culpable. Yo estaba en la fiesta con él, y ahora... no puedo creer que se haya ido.
Johanne: (tratando de animar) Louis, no es tu culpa. Nadie pudo haber predicho esto.
Louis: (abatido) Lo sé, pero me duele mucho. Éramos amigos y compartíamos tantas cosas.
Guissel: (sosteniendo la mano de Louis) Todos estamos pasando por esto juntos. Deberíamos estar ahí el uno para el otro.
Johanne: (decidido) Sí, tenemos que apoyarnos mutuamente en este momento difícil.

Mientras tanto, en otro lugar, José estaba preocupado por las implicaciones de sus acciones y estaba tratando de idear una forma de escapar de la situación.

José: (nervioso) No puedo creer que esto esté pasando. Si descubren lo que sucedió, todo se desmoronará.
José pensaba en su próximo movimiento, consciente de que la verdad podría salir a la luz en cualquier momento.

La universidad estaba sumida en un ambiente de conmoción y tristeza. Los estudiantes y el personal se preguntaban cómo algo tan terrible había ocurrido en su propia comunidad. La investigación policial avanzaba, y todos los involucrados estaban a punto de enfrentar las consecuencias de sus acciones, mientras que Josué y Neftalí trataban de encontrar la mejor manera de lidiar con la situación y protegerse a sí mismos.