**Capitulo 41: Terror en la Fiesta**

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Los acordes de la fiesta envolvían la noche. El bullicio de la multitud y el ritmo frenético de la música creaban una atmósfera de euforia. Entre los asistentes, Josué compartía risas y bailes con sus amigos y su novio Johanne.

En medio de la festividad, Louis se acercó a Josué con una solicitud inusual.

Louis: ¿Te gustaría acompañarme a comprar algunas cosas?
Josué: ¿Por qué yo? ¿No tienes a alguien más?
Louis: No, solo necesito ayuda para traer gaseosas para la fiesta.

Josué lanzó una rápida mirada a Johanne antes de aceptar.

Josué: Amor, Louis y yo iremos a buscar gaseosas. ¿Te importa?
Johanne: No, por supuesto que no. Adelante, te espero aquí.
Neftalí: Cuídense, amigos.

Josué y Louis partieron hacia el supermercado cercano. En el trayecto, Louis abrió su corazón y reveló sus secretos más oscuros.

Louis: Aún extraño a Yasser. Nuestra relación era mucho más profunda de lo que parecía. Éramos más que amigos, éramos novios en secreto.
Josué: ¿Novios?
Louis comenzó a llorar, un llanto contenido que expresaba el dolor de sus palabras.

Louis: Sí, nuestra relación estaba oculta. Éramos discretos en público, pero en privado podíamos ser nosotros mismos. Extraño sus besos y abrazos.
Josué: Lamento mucho lo que pasaste. Nadie merece guardar secretos tan pesados.

Después de comprar las gaseosas, regresaron a la fiesta. Sin embargo, Louis se debatía en su interior.

Louis: (¿Por qué José quiere que drogue a alguien y lo lleve al cuarto 54? No puedo hacerlo, él sabe cosas de mí, no puedo seguirle el juego).

Cuando llegaron al auditorio, Josué se reunió con sus amigos, mientras Louis se unía a José para una conversación crucial.

Jose: ¿Por qué no hiciste lo que te pedí?
Louis: Aún no lo he hecho. Yasser le contará a su novio y sospecharán de mí si desaparece.
Jose: Solo hazlo como te pedí. Necesito que lo hagas.
Louis: Él no merece esto. Tú fuiste quien fue infiel, no puedo hacerlo.
Jose: Si no lo haces, todos sabrán quién eres en realidad.

Josué y Johanne compartían momentos felices en medio de la fiesta. La alegría y la música los rodeaban mientras se abrazaban y reían.

Josué: Esta fiesta supera la de los nuevos ingresos. Estoy contento de estar aquí.
Neftalí: Definitivamente, es mucho mejor.
Johanne: No suelo venir a estas cosas, pero es una buena distracción de las tareas.

En ese instante, Antoine hizo su entrada.

Antoine: Hola a todos, ¿cómo están?
Josué: ¡Vaya, Antoine! Un milagro verte aquí.
Antoine: Mi novia está ocupada con tareas, por eso me uní a la fiesta.
Johanne: Comprendo, es bueno que se enfoque en sus estudios.
Neftalí: Sí, muy aplicada.

Johanne se alejó para solicitar una canción al DJ y tuvo un momento a solas con la música. Los asistentes formaron un círculo mientras sonaba la melodía suave de "Ribs" de Lorde. Josué disfrutaba de la canción que le recordaba a buenos momentos.

Josué: Amo esta canción.
Johanne: ¿Me permites esta pieza?
Josué: Por supuesto, adelante.

El baile de Josué y Johanne envolvía a la multitud. Las miradas de todos se posaban en ellos mientras compartían la danza.

Al finalizar la canción, Saraí comentó sobre la envidia que les tenían como pareja. La noche continuaba, pero un vaso con una bebida cambió todo.

Louis se acercó a Josué con una bebida manipulada, con la intención de dormirlo. El diálogo que seguía se convirtió en un juego de sombras y engaños.

Louis: Hola Josué, toma esto. Gracias por escucharme.
Josué: Gracias a ti. Siempre puedes contar conmigo.

Josué bebió la sustancia, sin saber las consecuencias que vendrían.

En otro lugar, María preparaba una carta para Josué antes de un viaje. Ella quería que Elizabeth lo conociera y había dejado una nota explicando su ausencia.

La fiesta continuaba, pero Josué comenzó a sentirse mal. Mientras Louis y José observaban, Nayeli también se acercaba, observando en silencio. Una serie de eventos oscuros estaban a punto de desencadenarse.

El secreto de Josue Donde viven las historias. Descúbrelo ahora