GIANELLA. // Darkiel. [TERMINADA]

♡ 15 ♡

GIANELLA.
21 de Octubre 2011, Lares (Puerto Rico).
- Ella es la sensación del bloque, yeah. Una morena latina, tan fina cuando ella... -canto mientras barro- Sera su cuerpo, no sé. Será su pelo, no sé...

Dejo la escoba en su sitio y vuelvo a la sala de estar. Alzo los almohadones del sofá y veo un agujero.

Frunzo el ceño y meto la mano.

¿Qué es esto?

Agarro el estuche para gafas de sol y la abro.

Dios mío...

•••

- ¿De qué querías hablar tan urgentemente conmigo? -pregunta papá dejando una bolsa con comida sobre la mesa del comedor-

- Siéntate, es serio. -digo- Ya vuelvo.

Agarro la cajita que guardé en mi cuarto y la pongo en la mesa, delante de mi papá.

- Ábrela. -digo señalándola-

Me mira cómo preguntándome qué es todo esto y después abre la caja negra. Mira todo lo que hay dentro y después me mira frunciendo el ceño, como enojado.

- ¿De dónde puñeta sacaste ésta mierda, Gianella? -dice-

- Mío no es, y tuyo ya veo que tampoco. -digo con los brazos cruzados-

Se levanta alterado de la mesa y se pone a hablar solo, diciendo malas palabras.

- ¡¿Cuántas veces más voy a tener que decirle a tu madre que no meta droga a esta casa?! -le grita al aire- ¡Puñeta!

- ¿Qué pasa?

- A ti es que te quería ver... -dice mi papá agarrando el brazo de mi mamá y arrastrándola hasta la mesa para que vea la caja con heroína y las cosas necesarias para consumirla-

- ¿Por qué te haces el santo ahora si cuando yo te conocí tu eras un pobre teco que no tenía na'? -dice mi mamá alterándose-

Siempre hace lo mismo.

Se altera ella, empieza a gritar para que mi papá se canse y termine la discusión. Siempre quiere ser ella la que acabe con la última palabra aunque no tenga ni pizca de razón.

- Por esa misma razón dijimos que nada de drogas en esta casa. -dice mi papá a los gritos- Cuando supimos que estabas enbarazada de Jonniel me prometiste que lo ibas a dejar y ahora me vengo a enterar de que sigues con esta mierda. Diablo, chica, se más responsable. Sabes cómo yo lo pase por esa mierda, cambié por ti, lo dejé por ti, sabes cómo lo pasó Jonniel y lo que tuvimos que hacer para que lo deje, ¡¿y ahora tú metes eso a la casa?! Diache, ¿no ves que tienes a una chamaca de diecisiete años sola todo el día aquí? ¿Quieres que acabe como tú?

- ¿Cómo como yo? -dice mi mamá mirando a mi papá con rabia- ¿Vendiendo su cuerpo para traer dinero a la casa? ¿Siendo una puta? ¿Una drogadicta?

- ¿Vendiendo tu cuerpo para traer dinero a la casa? -se ríe mi papá- Siempre a final de mes nos quedamos en rojos y tu excusa siempre es... "No me pagan mucho".  Tus putas excusas ya no te las creo, ahora ya sé que todo el dinero te lo comías en ésta porquería.

- Mami... -digo acercándome a ella al verla llorar-

De repente siento una fuerte cachetada que deja un ardor en mi cachete.

Rápidamente llevo mis manos a la zona y comienzo a llorar, fue fuerte.

- ¡Para que aprendas a quedarte callada! -me grita mi mamá con sus ojos inyectados en sangre por la rabia-

- Yo me largo de acá. Harta estoy ya de estar en esta casa. -digo yendo a mi cuarto-

Agarro un bolso y meto ropa y mis libros de la escuela.

Ni siquiera sé a donde ir.

El celular me vibra alertándome de una llamada. Me siento en la cama y contesto.

- Chamaquita, quiero verte, estoy en Lares. -oigo la voz de Omar nada más contestar-

- Ho...Hola. -contesto con la voz temblorosa por haber llorado recientemente-

- ¿Mami, qué te pasa? -dice con preocupación-

- Omy, ¿puedo quedarme el fin de semana en tu casa? -le pregunto agarrando mi bolso con ropa y mi mochila y saliéndome por la ventana-

- Sí, claro. -dice- Ven y así me cuentas qué te pasa.

- Okay, ya voy en camino. -digo-

- Acá te espero, baby.

•••

- Mami, todo va a estar bien, todo se va a solucionar. -dice Omar abrazándome por la espalda y dejando besos por mi hombro. -Yo voy a velar porque no te pase nada, porque no te sientas sola. Te quiero, ¿me oíste? -asiento y me giro hundiendo mi cabeza en su cuello aprovechando para oler su rico perfume- Diablo... Tengo unas ganas de agarrarte ahorita mismo...

- ¿Y por qué no lo haces? -digo sintiendo como su mano va bajando hasta mis nalgas-

•••

- Ah... ah... ah... Omaaar... -gimo- Más rápido...

- No cierres las... Piernas... -dice entrecortado mientras aprieta mi cintura-

Me cambia de pose poniéndome en cuatro.

- Omar, coño. -digo al sentir que me muerde y después me da una nalgada-

- Diablo, es que te veo eso ahí atrás y no puedo resistirme. -dice apretándolas con las dos manos-

Aumenta la velocidad mientras con una mano toca mi punto más sensible.

- ¡Omyyyyy! -grito cayendo rendida-

Me salgo y le canto hasta que se corre.

•••

- ¿Tú estás puesta pa' mí? -pregunta tomándome por sorpresa mientras abrazo su cuerpo que solo esta protegido por unos boxers-

- Siempre voy a estar puesta pa' ti. -digo segura de mis palabras- ¿Y tú? ¿Tú estás puesto pa' mi?

- A pesar de mi apariencia y de lo dicen por ahí, tú eres la que sabe cómo soy, sabes cómo alegrarme, como enojarme, como tranquilizarme... Diablo, parece que me conocieras de toda la vida. -dice-

- Respóndeme entonces, ¿eso significa que estás puesto solo pa' mí? -vuelvo a preguntar-

Asiente y me besa.

- Te quiero. -dice abrazándome más a su cuerpo-

- Y yo...