GIANELLA. // Darkiel. [TERMINADA]

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GIANELLA.
23 de Septiembre 2019, San Juan (Puerto Rico).
- Hello. -digo contestando a la llamada-

- Giany, soy Alesha. -contestan-

- Hola, Ale, ¿pasó algo? -pregunto al notar su voz temblorosa-

- Es Nick, está grave en el hospital. -dice-

- ¿¡Qué le pasó!? -pregunto saliendo de mi despacho junto con mi bolso-

- Le dispararon... -dice-

- Okay, okay, okay... Mera, este... -digo entrando rápidamente al carro-

- Gianella, ven rápido, se muere...

- No, no, no... -digo intentando tranquilizarla- Alesha, él es fuerte, no le va a pasar nada. ¿Están en Lares? -pregunto subiéndome al carro-

- Sí, sí, lo están trasladando en ambulancia. -dice-

- Bueno, yo ya voy para allá. -digo- Llego en media hora

- Okay, acá te espero. -cuelga-

Agarro mis cosas y salgo de mi oficina.

- Que me preparen el helicoptero, por favor. -le digo a mi secretaria antes de entrar al elevador-

...

- ¿Dónde está? -le pregunto mientras me acerco a ella- Alesha. Alesha, ¿dónde está Nick?

- Ya no está. -dice fría- 

No, él no puede estar muerto. Nick no está muerto, me niego a aceptarlo.

Solo tarde treinta minutos, no puede estar muerto.

Me encamino hacia la morgue del hospital sin poder creer lo que dice Alesha.

- Vengo a ver a Nick Brown. -le digo al primer doctor que encuentro- ¿Está aquí?

- Señorita...

- Acosta. -digo- ¿Él está ahí dentro?

- Señorita Acosta, usted no puede estar aquí. -dice- Es mejor que no entre, el proceso no terminó.

- Estoy aquí y lo voy a ver. -digo decidida dándole dinero-

El amable hombre abre la puerta y me deja pasar. Con un poco de miedo, entro a la morgue mirando lo que está delante de mí, un cuerpo sobre una camilla y tapado hasta arriba con una sábana blanca.

- ¿Está segura de esto? -pregunta el doctor poniéndose al lado de la camilla mientras me mira-

Tomo una profunda respiración y alzo la mano deteniéndolo al verlo a punto de retirar la sábana. El doctor se va dejándome sola por lo que decido acercarme y quitarle yo misma la tela.

- Estás dormido... -sonrío al ver la cara de Nick-

Se lo ve tan sereno...

Acaricio su frente y deposito un beso allí mirando su cuerpo inmóvil.

- Estás helado. -digo al sentir la fría temperatura- No quiero que te enfermes. -digo subiendo la sábana hasta sus hombros-

Sonrío y destapo uno de sus brazos para agarrar su mano entre las mías.

Miro su cara mientras lloro.

- ¿Qué te pasó en la cara? -le pregunto viendo los golpes- ¿Qué te pasó? ¿Por qué estás tan frío?

Me limpio las lágrimas rápidamente y le saco la sábana.

- Vamos. -digo destapándolo- Despierta... Levántate. -agarro sus hombros llorando cada vez más- Levántate. -sacudo su cuerpo- ¡Por favor, despierta! ¡Despierta! ¿Por qué sigues ahí? ¡Vamos! -lloro sin entender nada- Vamos, levántate. Levántate, Nick. Por favor... Por favor, Nick.