OPIA (Éxtasis #2)|C.V.|Completa.

C29: Vida de mierda.

—¿Qué...?

—Danna, sé que no confías en mi con todo lo que hice antes y créeme que en verdad me siento completamente arrepentida por todo lo pasó...realmente...estaba aferrada a Christopher cuando desde el principio él me dijo que te amaba y fui yo quien no lo quiso ver pero te juro por lo que quieras que no te estoy mintiendo...—susurró.

—¿Tú lo sabias, Hailee?—cuestionó Danna completamente sorprendida.

—No...—murmuró.—De hecho tampoco tenía ni idea de que Chris había vuelto a Chesburg...sino hubiese sido por ti...de verdad lo lamento, Dan...

Danna negó firmemente y cerró la puerta detrás de sí misma.—No podemos hablar aquí...—anunció. Una pequeña sonrisa se instaló en los labios de Odaly y asintió débilmente.—Cerca de aquí hay una cafetería...

Caminaron en silencio hasta la cafetería de aspecto hogareño que tanto le gustaba a Danna y que había descubierto unos días después de llegar a Miami. Era un lugar bonito, era pequeño pero era muy acogedor y lo que más le gustaba de todo era que la pareja de mediana edad que la atendía –la que ella suponía que eran marido y mujer- siempre tenían una amable sonrisa en el rostro. Siempre parecían estar dispuestos a tener una buena charla para cualquier cliente fuese de la edad que fuese.

Se sentaron de manera lenta sin importar demasiado el lugar. El cerebro de Danna realmente no daba para más. Su vida se estaba volviendo complicada y estaba completamente segura que de seguir así muy pronto iba a terminar volviéndose loca.

—Escucha...sé que puede sonar raro lo que te voy a decir pero tienes que confiar en mí...—anunció Odaly. Danna no respondió, se limitó a observar a Hailee un momento.—Sé que es difícil lo que te estoy pidiendo pero de verdad...vengo en son de paz y con las mejores intenciones del mundo...

—¿Por qué quieres ayudarme?—cuestionó simplemente.

—Porque eres una de las mejores amigas de mi hermana...—respondió.—Y porque sé muy bien cuando amas a Christopher y también sé que estás sufriendo aunque estés molesta...

—Odaly...

—Blondi puede llegar a ser muy peligroso, Danna...—suspiró.—Christopher lo sabe...no es el tipo de hombre que vaya por la vida haciendo amenazas sólo porque sí. Él las cumple y sé muy bien que Christopher no está en Chesburg ahora mismo porque su voluntad...

—¿Estás tratando de decir que está...obligado...?—cuestionó en medio de un gemido.

—No lo sé a ciencia cierto pero podría apostar mi vida entera a que si...—murmuró.—Christopher no quería seguir corriendo, Danna...algo debió haber pasado para que haya tenido que volver...

—Lo que no entiendo es porque Finnley y Monique...son los hijos de Blondi, ¿sabes lo que eso significa...?—musitó desesperadamente.—Ellos nos engañaron todo este tiempo...—agregó.—Todo este tiempo han estado en mi casa ocultándonos su verdadera identidad...

—¿Y no se te ocurrió pensar que tal vez tus amigos te estaban protegiendo?—cuestionó Odaly sin apartar sus ojos verdes de los ámbar de Danna.—¿De verdad crees que fue una simple casualidad el hecho de que los Doherty hayan aparecido en tu casa nada más porque si?—inquirió.—Debe haber algo más...

—¿Qué quieres decir exactamente con eso?—Odaly suspiró.

—Si Christopher no corría en Chesburg por su propia voluntad...y los Doherty se convirtieron en tus nuevos inquilinos... ¿con que crees que Blondi controlaba a Vélez...?—murmuró lentamente tratando de que Danna lo entendiese.