Sin Control

Capítulo 39

Continúo con mis ojos sobre los suyos, no hay ningún tipo de expresión en mi rostro y por lo que veo en él tampoco, sólo está ahí mirándome haciéndome saber que verme acaba de arruinar su día y creo que comparto eso.

Él desvía su vista de mi y mira a otro lado pretendiendo que no acaba de verme, mueve sus dedos con mucha inquietud contra la tela del pantalón mezclilla que lleva puesto, lo conozco y sé que está nervioso.

—Bienvenido Jim, puedes tomar asiento —Dice el profesor sonriéndole mientras palmea su espalda amistosamente, Jim sólo asiente y camina hasta uno de los asientos disponibles, hay alrededor de tres asientos un poco alejados de mí pero no, él toma el que se encuentra justo a un lado de mi, camina por la fila y se sienta a mi lado sacando sus libros. Lo ignoro e intento no hacer contacto visual con él.

La clase empieza y el maestro comienza a escribir en el pizarrón, después de unos segundos nos pide que lo copiemos así que lo hago.

—Antes de que comiences a pensar mal de mi otra vez, sólo te digo que yo no planeé esto, créeme —escucho su susurro lo que me hace rodar los ojos, sé que espera que responda a eso pero no lo hago, me remuevo en mi lugar y continúo copiando —Por favor Sophia, sabes que no fue mi intención que esto terminara así, debes creerme.

Cierro mis ojos y suspiro, finalmente respondo:

—Últimamente no me has dado razones para creer en ti, ahórrate tus comentarios hipócritas—respondo de mala gana.

—Lo sé, sólo quiero que sepas que por lo menos trato de hacer que esto no sea fiasco para ambos —Vuelve a susurrar, lo miro y sonrió con cinismo.

—Tu sola presencia aquí es un fiasco —le digo, él niega.

—¿Así es esto ahora? ¿Odiarnos el uno al otro?—Pregunta y asiento al instante.

—Así debió ser desde un principio, ahora sólo cierra la boca y déjame escribir —desvío la mirada y lo ignoro, él ya no responde más así que hago mi intento de pretender que él no está ahí.

Ignorarlo es todo lo que puedo hacer durante cada segundo de esta aburrida clase, me es difícil concentrarme cuando sé que lo tengo a un lado y no puedo hacer nada para cambiarlo, ambos permanecemos en silencio y evitando miradas a toda costa, presiono una y otra vez el botón de encendido de mi celular esperando que diera la hora de salida para poder salir de este lugar pero ahora veo que es cierto, mientras más mires el reloj más lento pasa el tiempo, mi pierna se mueve inquietamente hasta que sucede, la campaña toca así que rápidamente tomo mis libros y me levanto de mi silla.

—Sophia...—lo escucho decir mi nombre pero lo interrumpo antes de que diga algo más.

—No—niego y camino lo más rápido que puesto hasta cruzar por la puerta de salida, por un momento creí haber escapado pero no es así, ya que Jim me alcanza tomando mi brazo y jalándome hacia él evitando que pueda seguir avanzando

—Espera un segundo, por favor.

¿Acaso no puede dejar esto en paz? Me engañó con una de mis mejores amigas, yo también le mentí y lo engañé, no me justifico pero ambos ya sabemos la verdad, ¿Acaso no puede sólo hacer su vida por su lado y yo por el mío?.

Su fuerza duplica la mía así que comprendo que puedo seguir forcejeando pero no lograré nada. Me doy por vencida a seguir intentando escapar así que dejo de hacerlo y me giro hacia él rodando mis ojos.

—¿Qué quieres? Debo irme, mamá se molestará —miento, mamá ni ha de estar pensando en mi en este momento pero es una excusa válida para salir huyendo.

—Tú mamá no se enoja cuando sabe que estás conmigo, sabe que estás a salvo —afirma, ruedo mis ojos nuevamente y me suelto de su agarre para después cruzar mis brazos.