Odiar los aeropuertos podría ser uno de mis más grandes defectos, aún más cuando estaba ansiosa por subirme al maldito avión y llegar de una vez por todas a Inglaterra. Manos sudorosas y ganas incontrolables de hacer pis cada cinco minutos, sin contar la cantidad de veces que Jack y Finn fueron detenidos por una foto con alguna que otra fan.
— ¿Otra vez? ¿Enserio, Emma?—Me dijo Jack al yo, por quinta vez en una hora, anunciar que tenía que ir al baño.
— ¡Lo siento!—Grité al alejarme, no había ni llegado a abrir la puerta del descuidado cubículo que ya tenía los pantalones desprendidos.
—Apurada, veo. —Dijo alguien con acento extraño justo en el momento en el que entré y cerré la puerta.—¿No es así?
Sin darme cuenta parecía que esta chica quería tener una conversación mientras yo hacía mis necesidades.
—Yeah...—Le contesté sin prestar mucha atención, ¡Dios! Tenía el inglés tan incorporado en mi sistema que ni me dí cuenta de lo que dije.
—Oh! So...You speak english?—Me preguntó sin ninguna dificultad aparente.
—También hablo español. —Le sonreí saliendo del cubículo, abrí la canilla y comencé a lavarme las manos mientras ella se las secaba con lo que quedaba de un rollo de papel.
— ¡Genial! Yo algo sé, no mucho pero puedo mantener una pequeña emm...mm...—Comenzó a murmurar en voz baja y de pronto entendí qué era lo que quería decir.
— ¿Conversación?—Le pregunté riendo un poco. Me recordaba a mí cuando recién había llegado a Inglaterra.
— ¡Si, si! ¡Eso!—Se rió.
—Soy Emma, y necesito eso que tienes en las manos. —Le sonreí mientras me presentaba.
—Paula Julie Maddox Jensen. —Me dijo seria. —Pero muchos me dicen Julie. —Sonrió y me extendió el tubo casi vacío.
—Un placer, Julie. —Me sequé las manos y escuché el anuncio del vuelo que estaba por despegar. El mío. —Me tengo que ir, ese es mi avión.
—Y el mío también, veo que vas a Inglaterra, ¿No es así?
—Efectivamente. —Le dije y ví su cara de confusión, tal vez ella no conocía esa palabra. —Sí.
—Vamos, te acompaño. —Me sonrió y me extendió el brazo para que yo lo tomara, cosa que dudé por unos segundos. Salimos caminando mientras ambas sonreíamos, esta chica inspiraba confianza y alegría. Lentamente la guíe hasta Finn y Jack, viendo como su rostro se iluminaba al verlos. ¿Una fan, tal vez?
— ¡Finn! ¡Jack! Oh my god...!—Fue la primera oración de una conversación repleta de bromas risas y recuerdos que compartían los tres. Resulta que Julie era una amiga de Caspar. Sí, de Caspar Lee. Qué pequeño resulta ser el mundo a veces, ¿No lo creen?
Por desgracia el asiento de Julie no estaba ni siquiera cerca del nuestro, pero eso no detuvo la conversación. SnapChat siendo nuestro medio de comunicación, las risas siguieron hasta que una azafata se acercó a decirnos, de forma educada, que cerráramos la puta boca de una vez. El viaje se hizo corto, desperté sobre el hombro de alguien a quien no conocía pero que parecía no molestarle ya que su cabeza había encontrado apoyo sobre la mía. Incómodamente incómoda me incorporé en mi asiento para encontrarme con los gemelos mirándome de forma divertida, las burlas sobre mi supuesto "nuevo novio" (El anciano de aproximadamente sesenta y cinco años que me había prestado su hombro para dormir) no cesaron hasta el momento en el que nos bajamos. Carteles y globos con mi nombre escrito se asomaban por entre las cabezas de las demás personas presentes, me fue inevitable no sonreír al momento en el que iba avanzando. Divisado ya una cabellera ombré, larga y extremadamente cuidada me eché a correr.
— ¡Zoe!
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Dios, creo que es la primera vez que publico un capítulo en menos de diez días. (¿Acaso eso tiene sentido?)
Sin más que decir, las amo mucho♥
xoxo, Katherine.